Atribuyen a una especulación la restricción de venta de azúcar
Lo mismo ocurre con el aceite. Hablaron también del comportamiento con algunos lácteos, fideos y arroces. Aseguran que la situación tenderá a normalizarse en poco tiempo.
Entidades de defensa del consumidor confirmaron que las restricciones para la compra de ciertos productos comestibles se instaló en Mar del Plata que atribuyen, en parte, a una especulación de diferentes sectores, esperando un incremento de precio. De todas formas, aseguran que no hay motivos lineales para el mecanismo, que la tendencia es a una normalización de la situación en pocas semanas y recomendaron a los consumidores "estar atentos" a los precios que "se disparan" e intentar reemplazarlos por otros.
Tanto desde Consumidores Argentinos como de Acuba señalaron que hay restricción para la compra de azúcar, aceite, algunos lácteos -como manteca y ciertas variedades de quesos-, en algunos lugares fideos y algunas marcas de arroz, pero no consideraron que se llegue a una escasez de dichos productos, en su mayoría de la canasta básica familiar.
Los referentes de ambas entidades están al tanto de las distintas explicaciones que se dan sobre la situación -desde ámbitos de la producción y desde ámbitos estatales-, pero advierten una tendencia a la especulación del precio de estos insumos, teniendo en cuenta que si hay restricción o escasez de ciertos productos en la góndola, esto lleva a una mayor demanda y, como consecuencia una tendencia a que el precio suba.
"Hay una cierta especulación de los sectores que están esperando una mejora de los precios para paliar los aumentos salariales que han firmado para sus empleados, que está en el orden del 25%" entendió Gerónimo Rossi, titular de Acuba.
"Tiene que ver con una especulación por los precios" coincidió Alberto Pellegrini, de Consumidores Argentinos, entidad que realiza un relevamiento mensual de precios en Mar del Plata.
Ambos compartieron que, en general, las góndolas de la ciudad no están tan abastecidas de productos como en otros tiempos, pero que no hay faltante de comestibles.
"Si escuchamos la voz de los productores, en el caso del azúcar han tenido un mal año, con huelgas, sequía seguida de lluvias o helada que produjeron poca producción, si se escucha al gobierno, dicen que lo que hay es mayor dedicación a la exportación" señaló Rossi. Pero agregó que "los ingenios dicen que la situación se va a normalizar en dos o tres semanas porque adelantarían la zafra 2010".
"Hay quienes dicen que la cosechando fue la esperada y que derivaron la producción al consumo industrial, dado que el hogareño no representa mucho y también hay quienes responsabilizan a que hay una mayor demanda minorista, que más gente puede acceder a más insumos, en parte por la asignación universal por hijo" apuntó, a su turno el referente de Consumidores Argentinos. "Hay restricción pero se encuentra azúcar" apuntó, agregó, para llevar tranquilidad a la gente.
La cuestión es que "según el precio acordado con el Gobierno el azúcar debería estar a 3 ó 3,20 pesos, pero está cerca de los cuatro pesos. "Yo recomendaría no pagar más de cuatro pesos por kilo de azúcar" indicó Rossi.
Ambos referentes recomendaron a la población tranquilidad a la hora de comprar insumos que, se difunde están restringidos. "A una familia tipo le dura bastante un kilo de azúcar" apuntó Pellegrini.
Tras señalar que la situación con el aceite es similar al caso del azúcar, Rossi, señaló que "la restricción perjudica al pequeño empresario, que compra, por ejemplo para su restaurante, no al cliente familiar".
En el caso de los lácteos, que entienden lleva un aumento de valores acumulado del 10% en lo que va del año, reconocieron que la restricción o escasez "perjudica al pequeño consumidor".
"Algunas empresas están fraccionando más los productos, de esta manera hay que comprar más -por ejemplo la manteca en panes de 100 gramos- y termina saliendo más caro".
"Hay que estar alerta porque siempre hay algún producto que está en ese ciclo de problemas. Estuvo el tema del tomate, la carne, ahora el azúcar, el aceite, fideos y algunas marcas de arroz" enumeró Rossi, recomendando "tratar de evitar" en la medida de lo posible, la compra de esos artículos que, temporalmente tienen un incremento desmedido.
En tanto Pellegrini recordó que "llama la atención la gran diferencia de precio que hay entre las dos primeras marcas de leche y la que existe entre la más barata de ésta y una segunda marca, que es de 60 centavos y un peso respectivamente".
En tanto sobre el aceite entendió que "hay puja de precios y las empresas están acaparando stock. Hay pequeños mercados que están teniendo problemas para conseguir o les obligan a comprar otros productos para venderles éstos".
De todas formas consideró que "notamos que se han frenado los fuertes incrementos" y que "han bajado las proyecciones de inflación para dos años -que según encuestadoras privadas era del 35% y ahora lo señalan en el 25%-".
"También notamos que han bajado productos como tomate, papa, lechuga, acelga, espinaca y limones, que habían subido mucho".
