Ayer, exactamente a las 8:28 hora argentina (11:28 según la hora del tiempo universal) se concretó el solsticio de junio -de invierno para el hemisferio sur y de verano para el hemisferio norte-.

Así, en esta región, ayer, el día del comienzo del invierno, según el calendario, fue también el día más corto del año.

Ahora, lentamente, los días se irán alargando hasta llegar al verano.

"El Sol alcanzó al mediodía la mínima altura sobre el horizonte del hemisferio Sur, por lo cual, las sombras son las más largas y el día fue el más corto, ya que el Sol dibuja un arco bajo el cielo, marcando el comienzo del invierno en el hemisferio austral" explicó la difusora de temas de astronomía, Claudia Pérez Ferrer, quién indicó que "todo lo contrario sucede en el hemisferio Norte".

"Esto se debe a la inclinación de 27º 23? del eje de rotación de la Tierra, lo que hace que a medida que se desplaza por la órbita alrededor del Sol, este ilumine a nuestro planeta en forma perpendicular en un momento sobre el hemisferio Sur, y en otro al hemisferio Norte, que es lo que está sucediendo ahora, marcando el verano boreal y el invierno austral" señaló la responsable de Achernar, Difusión de la Astronomía, agregando que "los rayos solares nos llegan en forma más oblicua, por ello también, la temperatura es menor".

Pérez Ferrer aclaró que "los cambios estacionales nada tienen que ver con la variación en la distancia Tierra-Sol, que si bien existe, no provoca los cambios de temperatura". En ese contexto apuntó que "la Tierra se encontrará en el perihelio (punto cercano al Sol) para los primeros días de julio, que en nuestro hemisferio es pleno invierno". En tanto este año, se producirá el afelio, el 6 de julio a las 08:26 hora argentina, cuando nos encontremos a 152.505.000 del Sol (la distancia promedio es de 150 millones de Km., que es la llamada Unidad Astronómica, medida de distancia, utilizada en astronomía, dentro del Sistema Solar).

Desde ayer, tanto la salida como la puesta de Sol, se producen en su punto más hacia el Norte de los respectivos puntos cardinales Este y Oeste. "Esto podemos notarlo tomando como referente a edificios, árboles u observando cómo incide el Sol dentro de nuestra cocina, por ejemplo" invitó.

Solsticios y equinoccios conforman los cuatro instantes en que anualmente se produce un cambio de estación. El cambio de una estación a otra, así como del estado de posición con respecto al Sol no se produce de forma repentina; el mismo movimiento de rotación y traslación terrestre produce un cambio constante y gradual que se va dando con el sucesivo transcurrir de los días, semanas y meses.