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10-07-2011

"Cuando el público elige a Eurocase está comprando un producto marplatense"

Grupo Núcleo fabrica en Mar del Plata unas 12 mil computadoras por mes para la marca Eurocase. Este año sumará una sofisticada línea de producción de memorias. La empresa es también una de las distribuidoras mayoristas de productos informáticos más grande del país que provee a las grandes cadenas retail.

por Gabriel Coronello Aldao

Grupo Núcleo es una de las distribuidoras mayoristas de productos informáticos más grandes del país que a la vez se dedica a la fabricación de computadores portátiles, PC y las nuevas all-in-one de la marca Eurocase en Mar del Plata. Su origen se remonta 15 años atrás, cuando sus dos socios fundadores, Pablo De Noia y Maximiliano González Kun, arrancaron con su pequeño negocio de venta de computadoras y servicio técnico informático en la esquina de Moreno y España. Lejos de acobardarlos, la crisis de 2001 les dio impulso para crecer y crear Delta, la otra marca de la compañía dedicada al comercio minorista de artículos tecnológicos que hoy posee 5 locales en Mar del Plata. Por aquel entonces el crecimiento en el volumen de las ventas hizo que De Noia y González Kun se animaran a pasar a otra escala y crear Núcleo, una empresa que hoy figura entre las principales mayoristas de insumos informáticos de la Argentina, y abastece a grandes cadenas de retail como Garbarino, Megatone y a otras firmas de venta de artículos electrónicos de escala local y regional. Pero ambos empresarios no se quedaron ahí. Decidieron dar un paso más y se aliaron con Eurocase para ensamblar los principales equipos de esa marca que actualmente se comercializan en todo país. "Cuando el público elige a Eurocase está comprando un producto marplatense, de cuya fabricación participó su primo, su sobrino o un amigo de un amigo", le explicó De Noia a LA CAPITAL. Actualmente Núcleo produce en su planta local unas 6 mil PC mensuales, 4 mil computadoras portátiles, 2 mil all-in-one y tiene previsto seguir ampliando su actividad, al incorporar una línea con capacidad para ensamblar 3 mil monitores LCD por mes y un nuevo equipo robotizado para producir todo tipo de memorias. La firma tiene hoy 270 empleados, una sede de su distribuidora en Buenos Aires y otra en Mar del Plata, donde también funciona la planta producción. Ahí mismo existe un área dedicada a la importación y un sector destinado a ofrecer servicio técnico a clientes.

- ¿Qué participación tiene la empresa en el mercado como distribuidora mayorista? -le preguntó LA CAPITAL a De Noia.

- Estamos entre las cuatro distribuidoras de productos informáticos más grandes del país. Tenemos como clientes a las principales cadenas retail como Garbarino, Megatone, Musimundo y muchos negocios locales, como puede ser en Mar del Plata Luro Autohogar o Fava. Ofrecemos un amplio portfolio de productos informáticos como PC, notebooks, netbooks, all-in-one y accesorios de distintas marcas, aunque nuestra marca es Eurocase.

- ¿Cómo llegaron a posicionar a la empresa en este lugar?

- Somos una empresa netamente marplatense que iniciamos con mi socio hace unos 15 años, con un local de atención al público, vendiendo equipamiento y ofreciendo servicio técnico. A medida que fuimos creciendo creamos Delta Computación, abriendo sucursales en lugares estratégicos de la ciudad. A medida que las ventas fueron mejorando y vimos que nuestros niveles de compra iban creciendo, en 2005 decidimos crear Núcleo como distribuidora mayorista.

- ¿De qué manera atravesaron la crisis de 2001, que provocó un fuerte retroceso en su actividad?

- Creo que nosotros pudimos aprovechar esa crisis como una oportunidad, en parte, porque en ese momento todavía teníamos una estructura muy chica. En esa época nos vimos obligados a dedicarnos a la reventa de productos usados y a la reparación de todo lo que había disponible. En 2001 había que salvar las papas como fuera; había que hacer magia para que un equipo siguiera funcionando a un costo ínfimo. Esta situación le dio oxígeno al pequeño comercio de venta y servicio técnico, mientras que directamente los negocios grandes como Garbarino y Fravega dejaron de vender. En esa recuperación nuestra mentalidad fue la de reinvertir muy fuerte. Ahora que lo cuento parece que todo sucedió muy rápido. Pero la verdad es que todo esto ocurrió de manera paulatina, fue casi una agonía y no fue fácil sobrellevar esa crisis.

- ¿De qué manera afectan hoy a su empresa las medidas del Gobierno nacional que frenan importaciones de productos tecnológicos e intentan favorecer la producción nacional?

- Yo percibo que este año están cambiando todas las reglas, que está habiendo un gran cambio, que va a modificar la torta de la comercialización. El Gobierno tomó una medida de manera abrupta, trabando las importaciones y alentando la producción, pero en Tierra del Fuego. Por lo tanto yo diría que somos una de las empresas afectadas por dedicarnos a la producción fuera de la isla de Tierra del Fuego. Todos los beneficios están allá y la nuestra es una de las dos empresas de la provincia de Buenos Aires en esta situación. Por eso estamos viendo si podemos obtener esos mismos beneficios.

- ¿Qué tipo de artículos podrían ser producidos de manera competitiva en el país?

- Principalmente notebooks que es el producto de mayores ventas. Pero siendo realistas, la producción nacional hoy es viable si hablamos de ensamblado y de ciertos artículos muy puntuales. En la mayoría de los casos no hay capacidad para fabricar de manera competitiva en la Argentina con los mismos volúmenes y precios que en China o Corea. En China, por ejemplo, existe una planta de producción de LCD que fabrica 100 mil unidades diarias, que equivale a todo lo que se vende en Argentina en un mes. Por eso cuando se habla de producción nacional hay que entender que esto significa la posibilidad de fabricar ciertos productos muy puntuales. En nuestro caso ya hacemos varias cosas, pero como novedad, acabamos de comprar un equipamiento robotizado para la producción de memorias en todos sus tipos, como las que usan las PC y los pen-drives. Esta será una producción local para el mercado nacional con materia prima importada que podrá ser ensamblada acá. Así como en el país se pueden fabricar memorias, también se puede producir otro tipo de cosas como plaquetas para monitores y televisores, decodificadores digitales y en algún momento se podrán placas para teléfonos celulares, placas de cámaras digitales.

- Pese a que en el aspecto productivo Núcleo se vea afectada negativamente, ¿qué opina en general de la decisión del Gobierno de frenar las importaciones para promover la producción nacional?

- Apoyamos la idea; creemos que a la Argentina le va a servir porque alienta la calificación de la mano de obra y el crecimiento de la industria. Pero en mi opinión habría que ajustar el impacto de esto. Mi pensamiento es que la prioridad en la producción la deberían tener quienes ya veníamos dedicándonos a esto. Por esto estamos tratando de tener las mismas ventajas que se les dieron a quienes hoy vienen y se instalan en Tierra del Fuego.

- ¿Cómo se asegura la empresa buena mano de obra?

- Es algo complejo. Pero hemos hecho convenios con universidades y estamos trabajando para eso. Hoy nuestra empresa, que nació con dos personas, tiene 270 empleados. Somos todos marplatenses y llega un momento en el que se hace más necesario crecer de una manera distinta. El gobierno municipal tiene interés en alentar a Mar del Plata como un polo tecnológico, para lograr que Mar del Plata tenga más beneficios, lo que me parece bien porque en la ciudad hay mucha gente que se dedica a esta industria, produciendo a nivel internacional.

- ¿Comparte la idea de que existe un modelo económico sostenido por el consumo interno?

- Lo comparto en un 100%. A mi juicio los bancos, en alianza con tarjetas de crédito y las grandes cadenas, fueron los grandes promotores de este consumo, que sigue en ebullición.

- ¿Por qué razón en la Argentina los productos tecnológicos siguen siendo más caros que en otros países?

- Porque la parte impositiva es muy fuerte. En otros países hay niveles de impuestos mucho más bajos, lo que permite que un salario rinda más. A eso hay que agregar el tamaño del mercado interno de cada país. Estados Unidos, México o Brasil tienen un mercado muchísimo más grande, lo que baja los costos.

- ¿Cómo nace la alianza de la empresa con Eurocase?

- Hubo un momento en el que las marcas de los productos como Toshiba, HP o Lenovo, fueron tomando auge, generando ventas. Entonces se presentó la oportunidad de hacer un acuerdo con Eurocase, para fabricar en el país buena parte de lo que se vende en el mercado nacional. Así ganamos identidad como distribuidores mayoristas y dejamos de ser un jugador más para pasar a tener un artículo propio.

- ¿Cómo cree que evolucionará este sector durante los próximos años?

- Soy optimista. Yo creo que se está trabajando mucho para la producción nacional, con medidas muy fuertes. Si tuviéramos la posibilidad de embarcarnos en eso sería muy bueno. El único inconveniente serio sería que se frenara el consumo interno, que es nuestro único mercado porque no tenemos capacidad de precios para exportar.

- ¿Mar del Plata tiene condiciones para ser un polo tecnológico?

- Sí. Mar del plata tiene una gran concentración de jóvenes, facultades, colegios técnicos, empresas arraigadas que producen y gente que ha hecho muchas cosas. Creo que si hubiera una decisión política que alineara todo eso se podría hacer mucho más. Ya tenemos las dos patas necesarias para empezar a caminar. Esto es algo que tendría que madurarse más. Yo creo que habría que mejorar las condiciones del parque industrial o replicarlas en otras áreas para este sector en particular. Eso sería muy interesante. La Municipalidad nos apoya en eso y creemos que es cuestión de tiempo.