El abordaje multidisciplinario en la cirugía de cuello y cabeza
Si bien la especialidad tiene su origen en la oncología, con el correr de los años se mimetizó con otras especialidades de la medicina. Su desarrollo ha conseguido mejorar los resultados funcionales y estéticos.
por Daniel Della Torre
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La cirugía de cuello y cabeza ha logrado un enorme avance en las últimas décadas en tanto se visualiza un futuro auspicioso de posibilidades debido a la constante innovación científica. Para los especialistas se trata de una práctica multidisciplinaria que permite alcanzar mejores resultados, sobre todo, en el abordaje del cáncer. La convergencia del desarrollo tecnológico con nueva aparatología y equipos aporta mejores posibilidades para los pacientes.
El doctor Norberto Aristide Mezzadri es jefe del Departamento y Servicio de Cirugía General del Hospital Alemán de Buenos Aires. Estuvo en Mar del Plata donde participó de XXIII Congreso Argentino de Cirugía de Cuello y Cabeza.
En compañía de unos de sus colaboradores más cercanos, doctor Juan Manuel Fernández, mantuvo un extenso diálogo con LA CAPITAL en las instalaciones del NH Gran Hotel Provincial. En su transcurso habló de las características de la especialidad, de su origen y del futuro que se avizora.
- ¿Cómo se funda y cual es la definición de la cirugía de cuello y cabeza?
- Esta es una especialidad que surge de la oncología en la década de 1920 en Nueva York. A lo largo de los años se fue mimetizando con otras especialidades y grupos de trabajo como, por ejemplo, la otorrinolaringología, la cirugía maxilofacial y la cirugía plástica. Lo cierto es que hoy es una práctica multidisciplinaria. Esto quiere decir que el cirujano de cuello y cabeza interactúa con otorrinolaringólos, cirujanos plásticos, neurocirujanos, dermatólogos, proctodontistas, fonoaudiólogos y nutricionistas, entre otros. La cirugía de cabeza y cuello es el arquetipo en el cual mirarse para el tratamiento interdisciplinario, y fundamentalmente, para el abordaje del cáncer.
La evolución
- ¿Cuál es el nivel de desarrollo alcanzado?
- Podemos decir que fue evolucionando desde el equipo quirúrgico a esto que refería, una práctica mucho más interdisciplinaria. En sus orígenes la cirugía de cuello y cabeza era muy mutilante, sobre todo la oncológica, ya que las técnicas de reconstrucción estaban poco desarrolladas. Pero desde la década de 1940 hasta la actualidad la convergencia del avance tecnológico, nueva aparatología, nuevos equipos y descripción de nuevas unidades anatómicas en colgajos, etc., ayudaron muchísimo. Se mejoraron los resultados funcionales y estéticos. Al fin de cuentas, la calidad de vida es mejor para el paciente y para el tratamiento del cáncer en particular. En la actualidad contamos con técnicas de abordaje mininvasivos.
- ¿Con menos trauma para el paciente?
- Exactamente. Esto pretende no sacrificar el objetivo de curación en el paciente oncológico y maximizar los resultados del hándicap funcional que puede tener una cirugía con el mejor panorama estético. Hay que tener en cuenta que se trata de pacientes oncológicos que tienen sobrevidas cortas. Primero porque la biología de la enfermedad es de difícil tratamiento, y segundo porque generalmente son pacientes que llegan a la consulta con estadíos avanzados.
- ¿Por qué sucede esto último?
- En ocasiones por diagnóstico tardío y por falta de conciencia social. Hay que tener en cuenta que se trata de una patología que suele afectar a estratos sociales de bajos recursos. Y muchas veces asociadas a condiciones ambientales, alcoholismo, tabaquismo intenso, mala higiene bucal, etc. En los últimos años se está agregando el virus de papiloma humano (HPV) que origina el cáncer de cuello de útero. Se ha visto que es desencadenante del cáncer oral lo cual genera una nueva secuencia de tumores. Sin embargo, podemos decir que en estos casos el pronóstico es mejor que en aquellos surgidos de factores epidemiológicos.
Abordaje del cáncer
- ¿Hay una franja etaria más predispuesta al cáncer de cuello y cabeza?
- El grueso de la patología es en personas mayores de 40 años. Son tumores poco frecuentes en gente joven.
- ¿Cuáles son las posibilidades de sobrevida?
- Lo que ahora está cambiando es la forma de abordaje de los tumores malignos avanzados. Hasta hace unos años el eje de tratamiento de estos tumores era la cirugía seguida, fundamentalmente, de radioterapia. El desarrollo de nuevos esquemas terapéuticos, nueva tecnología radiante y nuevas drogas, logró que en estos estadios avanzados el tratamiento estándar sea la radio y quimioterapia. Entonces, la cirugía queda como una segunda opción de rescate ante el fracaso ya sea por recurrencia del tumor o por persistencia ante la no respuesta al tratamiento indicado. De todos modos esto no mejoró los porcentajes de supervivencia aunque ofrece mejores posibilidades al paciente al evitar cirugías de tipo mutilantes.
- ¿La calidad de vida varía de acuerdo al tipo de tumor?
- De acuerdo a diferentes estudios de calidad de vida, se ha demostrado que hay algunos tumores en ciertas localizaciones que, en uno u otro enfoque terapéutico, logran mejores resultados. No hay duda de que hoy el tratamiento radioquimioterápico es el eje en casos de tumores avanzados.
- ¿En qué niveles de oferta terapéutica está Argentina para tratar este tipo de patologías?
- Depende de los lugares del país. En realidad, es muy heterogéneo. Esto forma parte de un equipo de trabajo y así tiene muchas ventajas. Se han demostrado las diferencias que existen entre el trabajo individual y el abordaje interdisciplinario. De esto depende el resultado final. Hay que tener en cuenta que son tratamientos muy agresivos y demandan un ambiente adecuado. Suelo decir que los pacientes están acostumbrados a un tratamiento quirúrgico agresivo, pero hay cirujanos que no son agresivos. Lo mismo ocurre con el tratamiento radioquimioterápico.
- ¿Y el tema costos?
- A decir verdad, el tema costos afecta a todos los núcleos sociales porque el desarrollo de las nuevas drogas que están apareciendo -llamadas "terapias blanco"-, son muy caras. En materia de números, en estos casos, los porcentajes de mejoría en la supervivencia son muy altos. Pero cuando se mide por el valor absoluto son pocos meses lo que se mejora.
- ¿Cuáles son las perspectivas de lo que viene en materia de innovación para esta especialidad?
- Son apasionantes. Sobre todo por el desarrollo de la genética, de la farmacogenética y de la farmacogenómica que permitirá desarrollar terapéuticas a medida de cada paciente en particular. Los tumores tienen un mapa genético y de acuerdo a ese mapa se podrá establecer una terapia personalizada.
