Los carteles desaparecen por el nuevo Código de Publicidad
Las fachadas de los comercios marplatenses deben adecuarse a la nueva ordenanza municipal, para evitar la polución visual. Algunos comenzaron con las obras pero otros se quejan por los costos. Hay plazo hasta el 12 de noviembre. En la calle San Juan los cambios ya son notorios.
Muchos de los comerciantes de la ciudad ya comenzaron a adecuar la fachada de sus negocios para estar dentro de la normativa impuesta por el Nuevo Código de Publicidad Municipal que prohíbe, entre otras cosas, la existencia de marquesinas o carteles sobresalientes aunque los mismos tengan inscriptos los nombres de la entidad.
En algunas zonas comerciales a cielo abierto, como en la calle San Juan, se notan los cambios y el desmantelamiento de carteles colgantes es casi cotidiano.
Sobre la Peatonal, todavía persiste la postal de polución visual, con numerosas marcas y publicidades que indican la existencia de casas de ropa de cuero, comida rápida y quiniela entre otros rubros.
"Cuando todos lo hagan"
En la tradicional tabaquería "Jockey Club", en San Martín entre Córdoba y San Luis, ostentan un gran cartel que está fuera de la nueva normativa pero que "sacaremos cuando los demás también lo hagan", señaló Norberto. Si bien destacó que "la medida me parece bien, porque la verdad es que la ciudad está muy congestionada visualmente", aseguró que "no recibimos ninguna comunicación oficial, sólo nos enteramos por las noticias".
En las perfumerías Ricart, con seis sucursales en distintos puntos geográficos de la ciudad que abarcan zonas como el centro o el centro comercial Güemes, informaron que "comenzamos con el desmantelamiento de los carteles, debido a que en la mayoría de los negocios sobresalían más de lo permitido por la nueva ordenanza".
Una de las sucursales de la marca deportiva de las tres tiras ubicada sobre la Peatonal, pegada a una sucursal de Rossi&Rossi muestran flamantes fachadas dentro de lo pedido por ley.
"Estamos para atrás"
En varios de los comercios ubicados sobre la diagonal Pueyrredon entre San Martín y Rivadavia los carteles marcan el paso de la vista indicando si se trata de un bar o una chocolatería.
"Lo que pasa es que estamos para atrás -señaló el encargado de un bar de la zona-, las ventas están paradas, los insumos aumentan y para colmo retirar todos los carteles tiene que correr por nuestra cuenta, cuando nos ayuda por la publicidad".
En el mismo sentido se expresaron algunos comerciantes de la calle Güemes, ya que las marquesinas con marcas ayudan a "la economía cotidiana, porque eso es un extra que tenemos. Ahora habrá que cambiar la ficha, ya veremos como hacemos", relató un comerciante especializado en el ramo gastronómico.
La nueva sucursal de la fábrica de pastas Don Francisco, en la esquina de Hipólito Yrigoyen y Rawson, tuvo en cuenta la nueva ordenanza y achicaron los carteles con los nombres en la fachada "para evitar problemas", explicaron.
Alem es otro de los centros comerciales a cielo abierto con numerosos carteles colgantes que, antes del 12 de noviembre, deberán retirar. Desde una heladería que permanece abierta todo el año adujeron que "los vamos a sacar, porque así lo indica la ley, pero nos ocasiona gasto en un mal momento porque la zona ya no es lo que era".
Nueva ley
De acuerdo al nuevo Código Publicidad, está permitido publicitar mediante elementos frontales en comercios colocados a no menos de 2,20 metros sobre el nivel de la acera y a no más de 3,6; en los locales con frente de hasta 10 metros podrán colocar frontales entre 2,20 metros de altura y los 3,60 metros de altura o la altura máxima del local (la altura que resulte menor) y ocupando un máximo de 2 metros del largo de la fachada; los que tengan más de 10 metros de largo podrán colocar frontales entre 2,20 metros de altura y los 3,60 metros de altura o la altura máxima del local (la altura que resulte menor) y ocupando un máximo de 4 metros del largo de la fachada.
En vidrieras se podrá publicitar mediante entelados artísticos en los muros medianeros, los cuales no deberán superar más del 70 por ciento de superficie del muro ni la altura del mismo. Dentro del entelado se podrán instalar avisos publicitarios al pie de los mismos que no superen el 15 por ciento de su superficie.
También mediante elementos publicitarios en pantallas de refugios de colectivos y sombrillas en las unidades gastronómicas, siempre con permiso especial para su emplazamiento o dentro de la línea municipal.
En tanto, la prohibición abarca a los anuncios publicitarios salientes; las marquesinas publicitarias; los toldos publicitarios; la colocación de los denominados pasacalles; los anuncios publicitarios pintados en forma directa sobre la superficie de las fachadas; las pinturas sobre los muros medianeros de los edificios de propiedad horizontal; los elementos publicitarios autoportantes en terrenos de propiedad privada; los elementos publicitarios frontales sobre barandas, columnas, calados, aberturas, pérgolas, escaleras, toldos, bajo o alto relieve o cualquier elemento y/o tratamiento arquitectónico relevante que presenten las fachadas, entre otros.
