Integrantes de las cámaras empresarias y gremios representativos de la actividad portuaria marplatenses, accederán finalmente esta tarde a la prometida reunión interministerial con los responsables de las carteras nacionales de Economía, Trabajo y Agricultura y Pesca. La reunión fue confirmada para las 18 en el Ministerio de Trabajo y adelantó la Municipalidad que la delegación marplatense estará encabezada por el intendente Gustavo Pulti, acompañado por el subsecretario de Gobierno Martín Aiello.

La convocatoria se formalizó ayer a la tarde, luego de que la semana pasada todas las cámaras y gremios de la actividad portuaria firmaran un documento que explica las razones de la crisis por las que atraviesan la pesca y demás tareas portuarias de la actividad. Ese texto ya llegó a manos de los ministros Carlos Tomada, Hernán Lorenzino y Norberto Yauhar, quienes a su vez pudieron compatibilizar sus respectivas agendas y aunar criterios para dar un enfoque homogéneo a la situación.

LA CAPITAL adelantó hace varios días los ejes centrales de ese documento, que en síntesis plantea la fuerte caída de la rentabilidad en el sector pesquero como detonante de una no menos importante baja de la actividad y el riesgo de que se afecten fuentes laborales provocando otra crisis más profunda de imprevisibles consecuencias para la economía marplatense.

Aunque no sea una garantía de éxito inmediato ni de soluciones mágicas, el hecho de que por primera vez se haya conseguido que tres ministerios de la Nación tomen en sus manos el tema, ya es un dato alentador.

Actividad de la flota potera

Horas antes de que se confirmara la reunión interministerial en Buenos Aires, dirigentes de varios sindicatos y de otras entidades vinculadas a la actividad portuaria subrayaron ayer la necesidad de que, pese a la crisis, se garantice la operatoria de los buques poteros. Exhibiendo una profunda inquietud por la delicada situación en la que se encuentra la industria pesquera local, explicaron que esta flota es la única que sigue funcionando con cierta regularidad, proveyendo descargas de materia prima que sirven como un aliciente para la estiba, el transporte, algunas fábricas y empresas proveedoras de insumos y servicios.

"Existen versiones que nos preocupan porque indican que el puerto de Mar del Plata está prendido fuego y queremos desmentirlas. Si bien entre el 60% y el 70% de los fresqueros están parados, la pesca del calamar sigue funcionando y nosotros estamos esperando la llegada de los buques poteros con los brazos abiertos" dijo a LA CAPITAL el secretario general del SUPA, Carlos Mezzamico.

El gremialista planteó de este modo su preocupación por evitar que la crisis por la que atraviesa el puerto local se extienda hacia un rubro que, por el momento, se mantiene relativamente al margen de las dificultades que envuelven a otros segmentos de la industria, ya que la temporada de calamar sigue su curso, arrojando resultados aceptables.

El planteo de Mezzamico tuvo lugar en el marco de una conferencia de prensa de la que también participaron dirigentes del Siconara, el SOMU, el SAON y el Smata, junto a la Cámara de Actividades Portuarias, la Cámara de Estibaje y Afines y Fecooaport.

Además de llamar la atención sobre la necesidad de "proteger" la actividad vinculada con la explotación del calamar -que, en el mejor de los casos, podría extenderse hasta agosto- todas estas instituciones hicieron saber su decisión de constituir un "foro" de análisis para evaluar la crisis, "unificar criterios" y "realizar aportes" a la búsqueda de soluciones.

Como una primera definición, el foro dejó traslucir su escasa expectativa frente a la reunión "interministerial" de la cual participarán hoy los ministerios de Economía, Trabajo y Agricultura de la Nación, para recibir un documento elaborado por el municipio que contiene las posiciones de las cámaras y los sindicatos del sector sobre la problemática que afecta a la pesca.

"Calculamos que los ministros y los secretarios ya deben estar enterados" de cuál la situación, dijo al respecto el secretario adjunto del Siconara, Jorge La Palma, relativizando así la posibilidad de que en este marco se obtengan avances concretos. "Por eso nos parece que lo correcto sería tener la oportunidad de describir esta situación ante la Presidenta, para que ella después instruya a sus funcionarios sobre lo que se debería hacer", agregó.

Entre los dirigentes reunidos ayer en la sede de la Cámara de Estibaje, ubicada en Acha y 12 de Octubre, varios recordaron su "insatisfacción" por la actuación de los ministros de las carteras laboral, Carlos Tomada y de Agricultura, Norberto Yauhar, durante el prolongado conflicto laboral que vivió el puerto el año pasado. "Recurrir a los mismos actores es como tropezar dos veces con la misma piedra", plantearon, aunque no descartaron de manera definitiva la posibilidad de que esta vez sí, su actuación arroje resultados positivos.

Por otra parte, los representantes gremiales hicieron algunas consideraciones sobre la situación económica y financiera del sector, aunque planteando matices respecto de la versión ofrecida por las cámaras. "Es cierto que los empresarios no están ganando lo que ganaban antes pero también sabemos que en este momento ellos tiene que asumir la responsabilidad social que les cabe y recordar que toda la riqueza que han generado la obtuvieron con el esfuerzo de los trabajadores de este puerto", subrayó Mezzamico.

Por su parte La Palma precisó que, según la versión de las empresas, la crisis tiene su orígen en que "los costos operativos de la actividad son altísimos" pero advirtió que, en ese contexto, lo concreto es que "los armadores tienen la posibilidad de resolver de manera estratégica si mueven o no mueven un barco", cosa sobre la cual, "un trabajador no puede decidir". Por eso "a los sindicatos nos corresponde denunciar la necesidad de que los empresarios asuman su compromiso y su responsabilidad frente a la sociedad", subrayó.