Se declaró en emergencia la Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera marplatense que desde ayer dispuso amarrar la flota en el puerto e interrumpir las salidas. Los armadores de este segmento -el más débil de la cadena pesquera local- están denunciando un estado de "quebranto financiero y económico" provocado por la caída de la rentabilidad y resolvieron paralizar la actividad "por no poder pagar el gasoil" que necesitan para movilizar los barcos.

Ayer se reunieron en la sede de la entidad, en la banquina del puerto para ratificar la decisión que venían madurando hace días y para firmar una nota que elevarán a las autoridades nacionales del área Pesca donde reclamarán soluciones urgentes. Están alarmados porque los proveedores de gasoil "además de aumentar los precios, han enviado notas de débito con intereses y han suspendido el suministro de gas oil para quienes estén con deuda", según dijeron.

"Las deudas incurridas y el ahogo financiero, producto de la rentabilidad negativa, no nos permite poder pertrechar los buques para un próximo viaje, razón por la cual quedaremos amarrados a muelle", sentenciaron. Según explicó el referente del sector Mariano Retrivi, el problema principal está en un valor adicional de $0,59 por litro que les facturan en el gasoil por transportarlo desde los tanques hasta la banquina del puerto, lo que sumado a los aumentos en los precios del combustible (dos seguidos de YPF en los últimos días), les encarece considerablemente los costos.

"Hay barcos que no pueden trabajar con un gasoil que les consume 80 ó 90 pesos de una cajón de pescado que se paga entre 110 y 120 pesos", graficó el dirigente.

En la nota al ministro de Agricultura y Pesca Norberto Yauhar que firmaron anoche los armadores de la flota costera le piden que "declare la emergencia económica del sector" en virtud de que "el aumento de costos de explotación, en especial de insumos básicos de un pesquero, como son el combustible, artes de pesca, hielo, cajones, estiba y víveres, combinado con una caída estrepitosa de los precios de venta fresca en banquina, tornan inviable la continuidad económica de flota".

También argumentaron que "no podremos recibir los créditos anunciados (en las recientes reuniones interministeriales) toda vez que no calificamos para los bancos, así como tampoco podremos comprar gasoil a precio mayorista, debido al altísimo costo que nos cotiza el distribuidor de YPF".

Finalmente, "la sobreoferta de variado costero producto del esfuerzo pesquero volcado sobre la costa por parte de flotas de mayor porte y de la gran cantidad de pesca no declarada que ingresa de comunidades costeras de toda la provincia de Buenos Aires, ha derrumbado los precios de todo lo que se desembarca".

En la parte resolutiva la asociación pidió "un subsidio para compra de gasoil, de al menos el 50 % de valor neto" y que "el Ministerio absorba o suspenda, mientras dure la emergencia los gastos de monitoreo satelital, Senasa, y aranceles por extracción".

Además reclaman se provea la cobertura de ley para el personal dependiente de cada embarcación, la eximición de aranceles y límites o trabas de importación para los insumos y repuestos que se utilizan a bordo, y que "se gestione ante el Ministerio de Trabajo nacional y en forma inmediata los convenios de corresponsabilidad gremial".

En otros puntos de la nota piden: "Se denuncie ante la Provincia de Buenos Aires el oligopolio permitido por el Consorcio Puerto Mar del Plata en los servicios de estibaje" y que "se dé por justificada la inactividad comercial de los buques mientras dure la emergencia económica".

El último reclamo contenido en la nota a Yauhar está dedicado a reclamar "un tipo de cambio preferencial para todos los productos que se exporten derivados del variado costero en la industria en tierra".