Juan Curuchet decidió jugar fuerte en política. Después de un breve paso por la dirección de Turismo, Deporte y Medio Ambiente, el ex campeón olímpico decidió aceptar la candidatura a senador provincial que le ofreció el gobernador Daniel Scioli. "No tengo miedo que la política perjudique mi imagen", dice. Y redobla la apuesta: "Me veo con proyección de futuro".

En una entrevista con LA CAPITAL, Curuchet cuenta desde cómo le dijo a su madre que se iba a dedicar a la política hasta que Cristina Fernández de Kirchner aprobó su precandidatura."Scioli le presentó la lista a la Presidenta y ese también es un orgullo porque ella también me eligió", afirma.

-¿Cómo se vive la primera campaña política?

-Política sí, pero deportiva no. Ya hice la campaña de Gerardo Werthein para presidente del Comité Olímpico que fue una elección con casi sesenta federaciones. Hubo que hacer campaña porque también se presentaba Alicia Morea. Entonces fue una campaña política-deportiva, donde hubo muchas reuniones y proyectos de federaciones. Es cierto que la campaña deportiva es mucho más sencilla porque la sintonía entre el atleta, el dirigente y yo que venía a luchar por los derechos de los deportivas se daba más rápido. La campaña política es diferente.

-Dio un salto enorme en política que a algunos dirigentes les puede costar toda la vida para llegar. ¿Cómo lo está asimilando?

-El otro día estaba en Tandil recorriendo y yo les decía a otros dirigentes: "pegué un saltito". Y ellos me decían: "¿Saltito?" Y se reían. En el momento en que el gobernador me ofreció estar en al dirección de Turismo medianamente había posibilidades políticas. No estaba fijamente hablando porque siempre se depende de un armado de listas previo, pero había una posibilidad. Todos los que estamos dentro de la función pública estamos a disposición del gobernador.

-¿Y qué hiciste cuando te lo ofreció?

-Cuando me lo ofreció lo primero que hice fue hablar con mi familia. Cuando yo hablé con mi vieja el tema de la dirección de Turismo, le dije que había una posibilidad de otra cosa. Nosotros somos mucho de familia y mi vieja sigue siendo la vértebra central. Entonces le comenté que estaba la posibilidad de continuar un proyecto en la política. Y ella me dijo: "tenés toda tu familia bien, has logrado todo. ¿Por qué?". Y le respondí: vos me enseñaste que si había cosas que cambiar había que hacerlo con compromiso y con trabajo. Ahí me dijo está bien. A ella fue la primera que tuve que convencer. Después lo hablé con mi señora porque trabajar en política después de toda una vida deportiva lejos de la familia, volvía a significar un alejamiento. Entonces cuando tuve la aprobación de la familia empecé a hablar con Daniel (Scioli) y me contó la posibilidad que había. El le presentó la lista a la Presidenta y ese también es un orgullo porque ella también me eligió.

-¿Tuviste que volver a hablar con tu mamá para ser senador?

-Ya no (risas). En la primera le conté que había una posibilidad. Pero la entiendo. Hemos hecho mucho sacrificio y mi vieja, mi viejo y mi señora tienen miedo. Por eso tengo que entenderlos.

-¿Y vos nunca tuviste miedo de que la política termine perjudicando una imagen que construiste con mucho sacrificio y tiempo?

-No. Creo que todavía me cuesta verme, por ejemplo, en los carteles. Pero es una sensación muy personal. La gente me conoce y yo sé muy bien quién soy y a qué vengo. Eso te da una fortaleza. Y dentro de la política hay militantes de otros partidos que pueden no estar con mi forma de opinar y así y todo me respetan por lo que he sido deportivamente. Pero cuando encaré, lo hice. Además estar al lado de un tipo como el gobernador que ha sido deportista y te puede hablar en el mismo idioma, te entiende y te da soluciones. El apuesta a que yo lleve mis ideas de inclusión, igualdad y valores del deporte a la política.

-¿Cuáles son los pro y los contra de tu corta carrera política?

-Creo que soy una persona que entré a la política y yo me veo buenas proyecciones en el futuro como político. Soy una persona que aprendo y la vida me llevó sin tener nada a ser campeón olímpico. Y eso fue porque aprendí y usé mi inteligencia. Hoy creo que es lo que soy y los que me conocen saben a lo que vengo y por qué voy a luchar. Vengo a luchar por los derechos de los deportistas, a acompañar el proyecto del gobernador y a trabajar fuertemente entre el Ejecutivo y el Legislativo para seguir haciendo cosas que favorezcan a la sociedad. Me creo muy capaz para el futuro.

-¿Se acostumbra a la ansiedad de un cierre de lista?

-Lo viví con mucha tranquilidad. Los deportistas de alto rendimiento sabemos manejar la ansiedad y el límite de los nervios. Yo puedo estar sentado acá en esta entrevista con doscientas pulsaciones y hablar tranquilamente. Sabemos manejar eso. ¿Sabés lo que era encarar un Juego Olímpico donde todo el trabajo de cuatro años se puede perder por fallar por muy poco?. Entonces lo tomé con tranquilidad. Soy de esas personas que piensa que si las cosas se tienen que dar, se van a dar.

-Es una filosofía que no se da en todos los políticos. ¿No percibió la ansiedad de algunos candidatos?

-En el otro sí se ve. Estaba en un lugar donde había muchos compañeros y ellos lo vivían distinto. Eso no quiere decir que yo no lo haya disfrutado sino que estoy acostumbrado a los temples y jugar al límite. Eso de deportista me sirvió llevarlo a la política.

-¿Políticamente se define como un hombre leal a Scioli que se identifica con el proyecto presidencial?

-Yo pertenezco a un proyecto que comanda la presidenta y que desde el 2003 el gobernador ha seguido. Soy funcionario y pertenezco al Frente para la Victoria. No me puedo dividir. Elegí este proyecto porque como persona veo que se pueden hacer acciones rápidas.

- Repasemos a los rivales del Frente para la Victoria. ¿Qué le parece Sergio Massa?

-Massa ha manejado muy bien la imagen. Lo veo como un hombre que tiene sus capacidades y están a la vista porque ha hecho pero también es un hombre que ha sabido manejar bien el marketing para venderse. Me gustaría para tener una buena definición suya es seguir evaluándolo ahora en la campaña. La campaña descubre cómo es cada uno. Y de acá a octubre vamos a ir viendo el Massa verdadero.

-¿De Narváez?

-Lo veo muy guerrero. Muy crítico. En este país se han hecho muchas cosas y faltan muchas por hacer pero no me gusta cuando una persona ve todo negativo. Se ha hecho mucho y ahora él hasta critica la asignación universal por hijo. Lo veo muy crítico y se quiere posicionar como la oposición a través de eso. Pero yo creo que debe hacerse a través de ideas. A mí me gusta más la gente moderada y por eso me siento identificado con Daniel Scioli que es moderado y equilibrado y no un crítico con pocas ideas.

-¿Cree que el poco conocimiento de Martín Insaurralde puede perjudicarlos?

-Es un candidato muy interesante. Es un tipo capaz que ha transformado Lomas de Zamora. Ahí corrí toda mi vida y ahora vas y se ve una transformación. Una persona que tiene 70% de imagen positiva en su municipio por algo debe ser. De él me gusta que dice que aún quedan cosas por hacer y asume responsabilidades. Me gusta el político que reconoce.

-Por ahora las encuestas marcan que eso no le alcanza para ganarle a Massa.

-Vi a un Massa que se lanzó muy fuerte y ahora viene bajando. En cambio, Martín (Insaurralde) viene subiendo.

Ahora la brecha entre los dos se está acercando y se pone cada vez más cerca.

-En el deporte siempre soñaste en grande. ¿En política también?

-En mi vida deportiva pasé etapas y las fui cumpliendo. Una primera etapa mía en política es esta. Y seguramente será de una gran experiencia para mi futuro. Digo que tengo aspiraciones pero ahora necesito pasar esto para conseguir la fortaleza y la experiencia que quiero para proyectarme políticamente.