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11-02-2014

Piden tomar precauciones para no ser víctimas de secuestros virtuales

Hubo un aumento de los casos en las últimas semanas en Mar del Plata. El fiscal general federal Daniel Adler instó a los vecinos a estar alertas frente a esta modalidad delictiva que se comete mediante llamadas telefónicas.

Ante el aumento de los secuestros virtuales en las últimas semanas en Mar del Plata, el fiscal general federal Daniel Adler pidió ayer a los vecinos estar alertas y tomar una serie de precauciones para no caer en el engaño y ser víctimas de esta modalidad delictiva.

El secuestro virtual es un delito que consiste en obtener dinero de una persona a quien se le hace creer mediante una llamada telefónica que alguien de su entorno está privado de la libertad. "La persona que recibe el llamado debe tratar de ubicar rápidamente al familiar presuntamente secuestrado o a sus allegados. También debe comunicarse con la Policía para que intervenga en el caso", recomendó Adler.

Al recibir un llamado de algún desconocido con la excusa de que un familiar está internado en un hospital, pero se desconoce la identidad, desde la Justicia aconsejaron no entregar datos de parientes o amigos porque, sin querer, se facilita al delincuente la información para concretar el secuestro.

"Si bien se han esclarecido algunos hechos, en los últimos días hemos observado un recrudecimiento de los secuestros virtuales. Lo importante es que la población esté alerta y sepa que se trata de un cuento del tío virtual. En este tipo de hechos la inseguridad no existe y es creada en forma ficticia por personas inescrupulosas que cometen un delito", dijo Adler.

El secuestro virtual es un delito que se comete con llamadas telefónicas. Mediante el ardid de que tiene secuestrado a un miembro de la familia, el delincuente juega con la desesperación de padres o parientes y los obliga a pagar, generalmente en un plazo no mayor a una hora, una suma de dinero o un determinado importe en tarjetas telefónicas. Como ese familiar no está localizable porque salió a bailar o porque en ese momento estaba en algún lugar donde no podía atender el teléfono, los padres no saben que no está secuestrado y muchas veces pagan los rescates. Nunca hubo secuestro, pero del otro lado de la línea el familiar de la víctima no lo sabía. El delincuente se aprovecha de la desesperación para obtener dinero.

"Al recibir un llamado de un supuesto secuestro virtual, las personas deben tener la lucidez de comunicarse con el familiar o sus amigos antes de realizar cualquier tipo de acción. Aunque las víctimas se ven sorprendidas por el horario en que reciben las llamadas, generalmente a la madrugada, y creen estar escuchando la voz del familiar cuando en realidad es un delincuente", afirmó Adler. Y enseguida agregó: "Los ladrones se aprovechan de la desesperación del familiar y le hacen llevar a una esquina el dinero para el pago del rescate". 

La maniobra comienza con una llamada telefónica. El delincuente que se dedica a los secuestros virtuales elige una característica y comienza a llamar a los distintos números. En una de esas comunicaciones atienden.

"Te llamo desde el hospital porque se accidentó una persona que tenía un papel con este número de teléfono anotado, pero no llevaba identificación, ¿es su suegro no?", expresa el delincuente, simulando estar preocupado. Del otro lado la respuesta puede ser: "No, mi suegro murió hace varios años", con lo que el delito se aborta, o "Sí, puede ser mi suegro". Esta respuesta indica al asaltante que el receptor cayó en el engaño y, luego, obtiene el nombre del familiar. Después, con los datos obtenidos, el ladrón vuelve a llamar y dice que el familiar está secuestrado. El delincuente actúa rápido, antes de que el damnificado encuentre a su familiar y advierta que está bien y que todo fue un engaño.

Generalmente, esta variante de los secuestros virtuales es cometida por asaltantes que están detenidos en penales, que se aprovechan del elemento sorpresa y del shock que causa en una persona recibir la noticia sobre un familiar accidentado. Pero también hay casos en los que los autores no son presos que actúan solos, sino bandas que obtienen los datos de los integrantes de una familia a través de llamadas telefónicas.

"Pese al esfuerzo de la Policía y la Justicia en el tema, los secuestros virtuales siguen ocurriendo. Por eso pedimos a la población que tome recaudos para no caer en el engaño de los delincuentes", insistió Adler. Además, el fiscal dijo que la semana pasada hubo varios detenidos acusados de cometer secuestros virtuales y señaló que se están investigando otros casos. "Si bien tenemos una situación seria de inseguridad, también hay situaciones creadas de inseguridad como los secuestros virtuales", expresó.

Esta modalidad delictiva no es nueva, pero en los últimos meses sus autores han alcanzado mecanismos más sofisticados para engañar a sus víctimas, mantenerlas en vilo durante horas y sacarles toda la información necesaria para obtener el botín. Ahora, utilizan varios celulares al mismo tiempo para bloquear todo intento de pedido de ayuda o contacto con el supuesto secuestrado, buscan información en Internet sobre las personas que caen en su trampa para afinar su engaño y hasta amenazan con mutilar o matar a quien presuntamente tienen capturado. También simulan gritos de auxilio, haciéndose pasar por las falsas víctimas para “ablandar” al familiar que escucha aterrorizado del otro lado de la línea telefónica.

Consejos

1) Si está con alguien, indicarle que se comunique con el presunto secuestrado.

2) Si está solo, utilice su celular para llamar al presunto secuestrado.

3) Si no tiene celular, corte la comunicación, espere un tiempo prudencial e intente llamar al familiar. Esperar un tiempo antes de levantar el tubo nuevamente porque si la persona que lo llama no corta (en este caso el delincuente), la comunicación no se interrumpe y las personas creen haber llamado a su pariente y en realidad siempre están hablando con la misma persona que trata de engañarlos.

4) Si el diálogo continua, exija que le describa físicamente al familiar "secuestrado", que le dé detalles como nombre completo, apellido materno, fecha de nacimiento, altura, color de cabellos y de ojos, tatuajes o cualquier otra seña particular que le permitan a usted identificar a su familiar.

5) Apenas se tenga la oportunidad, comunicarse al 911.

6) Mantener la calma. Los delincuentes que se dedican a cometer secuestros virtuales juegan con la desesperación de la gente.