"Por razones ambientales (temperaturas elevadas y periodicidad de precipitaciones pluviales que a su vez provocan altos porcentajes de humedad) y también debido a que la población -voluntaria o involuntariamente- acostumbra a eliminar a sus depredadores naturales, en el Partido de General Pueyrredon, aunque no podemos calificarla de invasión, la cantidad de polillas que se advierte en esta época del año es mayor a la que hubo otras veces".

Así se expresó ante LA CAPITAL el jefe de la división Control de Plagas de la Municipalidad, Conrado Murdoca, quien explicó que "es lo que, por diversos motivos, está ocurriendo en determinados sectores. Si bien la temperatura y la humedad son aspectos climáticos que tienen que ver con ese crecimiento, la fobia que la gente le tiene a los arácnidos, sumado a la fumigación que se lleva adelante para eliminar moscas y mosquitos, juegan también un papel preponderante".

Al dar a conocer más precisiones, Murdoca sostuvo que los pájaros y las arañas son los principales depredadores de las polillas, "pero como a las últimas la gente les tiene temor, aunque la gran mayoría son inocuas, las suele eliminar; uno de las razones por la que lo hacen es porque, en general, las amas de casa consideran que la presencia de telas de araña en un hogar es sinónimo de falta de higiene. Se trata de un criterio que personalmente no comparto. No hay que olvidar que son artrópodos que ayudan a controlar la cantidad de moscas, mosquitos y polillas".

No transmiten

enfermedades

Acerca de éstas últimas, el funcionario sostuvo que su presencia no debe preocupar demasiado por cuanto no son transmisoras de enfermedades infecciosas. "Los problemas que pueden llegar a generar se dan en las personas predispuestas a sufrir algún tipo de alergia. Es lo que se conoce como lepidocterismo. Quienes lo sufren, al tomar contacto con las polillas suelen desarrollar alergias de tipo respiratorio o dermatológico, pero no más que eso", aclaró. Más tarde comentó que cuando la gente echa mano a los insecticidas para eliminar moscas y mosquitos, "las polillas encuentran un campo más libre para subsistir. Además de los pájaros y de las arañas, otros depredadores son los alguaciles, algunos escarabajos y grupos de hormigas. Apelar a la fumigación hace disminuir esa población. Salvo el insecticida que se utiliza para controlar las larvas de mosquitos, que es de carácter biológico, el resto de los que están en el mercado, provocan tanto la muerte de moscas y mosquitos como de mariposas, avispas y arañas".

Finalmente sostuvo que "con temperaturas como las que se están presentando en estos días, el período de crecimiento de las polillas dura aproximadamente entre 20 y 25 días".