LA PLATA (Corresponsal).- Días atrás se inundaron varias localidades de la Provincia, entre ellas Tigre y Pilar.

Que el fenómeno haya afectado a distritos de la zona norte del conurbano generó una polémica acerca de la existencia de barrios privados y sus nuevas consecuencias sobre el resto de la población.

En esta entrevista con LA CAPITAL, la licenciada en Urbanismo de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS), Laila Robledo, analiza la vinculación entre urbanizaciones cerradas e inundaciones y asegura: ?se han destrozado los humedales, adulterado el cauce natural de las aguas, elevado el terreno y luego se ha obtenido una rentabilidad extraordinaria para ocupar el territorio ?en términos de densidad- con 3 habitantes por hectárea?.

-¿Existe una relación entre las inundaciones y la proliferación de barrios cerrados?

-Existe una relación, pero no es la única causa. Históricamente hubo muchas inundaciones porque Buenos Aires es una llanura que tiene poca pendiente y a esto se suma que recientemente hubo una Sudestada. Ahora bien, lo que ocurre con los countries es que han ocupado todo lo que tiene que ver con valles de inundación, es decir lugares que son humedales. Los humedales son espacios que funcionan como una esponja para regular el ciclo del agua, como por ejemplo el Delta del Paraná. Si ocupamos esos espacios, el agua igual se tiene que escurrir por algún lugar. Los countries no solamente ocupan estos espacios; también se venden con una determinada lógica: como lugares de recreación y promoviendo un estilo de vida asociado al agua. Entonces se construyen terraplenes -que son grandes barreras- y se realizan grandes movimientos de suelo para que dentro de esos espacios puedan existir lagunas y que esos nuevos emprendimientos no se inunden. Por lo tanto cuando crece el río, el agua tiene que seguir algún curso y se dirige hacia sectores que no están preparados para recibir esa cantidad de agua. En general los barrios que están ocupando humedales se ubican en la zona norte de la Provincia: Pilar, Escobar y Tigre.

-¿Qué otras causas urbanísticas contribuyen a que haya inundaciones?

-Hay fallas históricas. Se han pasado por alto cuencas hidrográficas y cuando comenzaron los primeros loteos populares ?en las décadas del ?40 y el ?50- se vendió suelo inundable, no apto para realizar viviendas. Por otra parte, en ciudades como por ejemplo La Plata ?que es una ciudad que está planificada- el negocio inmobiliario ha hecho que se construya por encima de la capacidad de soporte, en áreas que no tendrían que haberse ocupado. Ahí se alentó la altura de las construcciones, entonces la impermeabilización del suelo no permitió que el agua pudiera escurrirse tranquilamente. Y tampoco se ha hecho caso a las advertencias de las universidades. Siguiendo con La Plata, allí se ha dicho que eran necesarias obras hidráulicas, pero como se trata de obras no visibles, que no tienen un impacto en términos políticos, se hizo poco caso a las recomendaciones. Hubo fallas en términos de planificación, hubo fallas históricas que tienen que ver con haber loteado lugares inundables. Todo tiene que ver con cómo la gente pudo acceder históricamente al suelo; en general, se permitió que primen los negocios privados más allá del sustrato físico. Y tampoco contamos con un mapa en el que estén determinadas las posibles zonas de riesgo.

-¿Este crecimiento urbano es responsabilidad de cada municipio o también intervienen la Provincia y/o la Nación?

-Cada municipio es responsable de la planificación urbana. La Ley 8912, que es la Ley de ordenamiento territorial y uso del suelo de la Provincia, determina que cada municipio debe planificar su territorio y determinar los usos del suelo. Pero cuando hablamos de inundaciones estamos ante un fenómeno que no reconoce límites municipales, por lo tanto hay que superar lo municipal y establecer acciones de carácter regional. Hay obras que superan a los municipios, como por ejemplo las obras que tienen que ver con el tratamiento de cuencas. Por otra parte, también está la responsabilidad de Nación, que tiene que garantizar que las políticas que lleva adelante cada una de las instancias de la gobernación rindan sus frutos.

?Ciudades navegables?

-Además de las inundaciones, ¿qué otras consecuencias sociales trae la instalación de barrios cerrados?

-En todos los municipios que poseen countries se produce una fragmentación muy importante del territorio en términos de conectividad. Hay muchas barreras urbanas causadas por las urbanizaciones cerradas. En la región metropolitana de Buenos Aires hay más de 650 urbanizaciones cerradas y cada una de ellas contribuye a generar espacios muy fragmentados. Cada vez que se producen inundaciones la gente queda no sólo inundada sino también con dificultades para poder salir de ese territorio porque, por ejemplo, no pasan los colectivos. Así, las diferencias sociales se expresan en términos territoriales. Históricamente los espacios inundables eran ocupados por poblaciones de escasos recursos. Esos espacios fueron, a lo largo del tiempo, ocupados por urbanizaciones cerradas, con el discurso de que ocupaban terrenos que estaban desvalorizados o abandonados para recalificarlos. Esto no ha sido por hacerle un bien a la humanidad, sino que se han ocupado espacios no aptos que, por eso, tenían ese escaso valor. Se han destrozado los humedales, adulterado el cauce natural de las aguas, elevado el terreno y luego se ha obtenido una rentabilidad extraordinaria para ocupar el territorio ?en términos de densidad- con 3 habitantes por hectárea.

-¿Qué espacio ocupan esas urbanizaciones cerradas?

-Lo que ocupan las 650 urbanizaciones cerradas de Buenos Aires es 2 veces el tamaño de la Capital Federal, que tiene aproximadamente 200 kilómetros cuadrados. Esto sin contar los barrios semicerrados, que son las urbanizaciones cerradas por los propios vecinos con la idea de ?protegerse?.

-¿En la última década aumentó la cantidad de barrios cerrados?

-Sí, en la última década ha crecido extraordinariamente, sobre todo en lo referente a la nueva lógica de habitar ?ciudades navegables?, asociadas al agua y a poder amarrar el velero en la puerta de la casa, a tener un spa. No sólo se han ocupado humedales, sino también el periurbano productivo, que es el borde en el que termina la ciudad consolidada. En ese espacio hay una disputa por la ocupación del territorio. Históricamente esos suelos eran más baratos por estar alejados del centro, pero en la actualidad están siendo ocupados por parques industriales y urbanizaciones, entonces compiten con los sectores necesarios para la agricultura. Creo que siempre se está hablando de la ciudad por partes, por problemas, por temas que en realidad están relacionados. La ciudad es un sistema complejo y lo que se haga en un lugar afecta en otro.