LA PLATA (Corresponsal).- Conoció al actual ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, en 1995 y hoy es uno de sus hombres de extrema confianza. Fernando Jantus, subsecretario de Planificación de esa cartera, comenzó a trabajar en el municipio de Ezeiza como secretario de Gobierno y luego como director general de Aeropuertos en la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), con Alejandro Granados hijo. Desde septiembre del año pasado está en ?la cancha? con el equipo que conformó el intendente Granados en su actual paso por el gabinete más caliente de la provincia de Buenos Aires.

Luego de que el año pasado Granados sorprendiera con el dato de que sólo 32.000 de los más de 55.000 efectivos de la Policía bonaerense están operativos, a Jantus le tocó incrementar la cantidad de policías en las calles. Y hoy asegura de haber conseguido un récord histórico en la cantidad de cadetes para sumar a la fuerza: ?Logramos que se inscriban más de 25 mil policías?.

Ahora tiene bajo su responsabilidad el armado de la cúpula provincial de las 50 Policías Locales para coordinar con los intendentes. En entrevista con LA CAPITAL, el funcionario bonaerense dijo que en los municipios las fuerzas locales, provinciales y federales ?tienen que confluir para que se autocontrolen entre sí? y aseguró que ?los intendentes van a tener en sus manos la solución para los problemas de seguridad?.

-¿Cuál es la idea fundamental de las policías locales? ¿Por qué tanto énfasis del ministro Alejandro Granados en esto?

-El concepto que maneja el ministro es que hace falta por un lado la Policía de la Provincia, por otro lado la Policía Local y por otro la Policía Federal. Las tres fuerzas tienen que confluir en cada uno de los lugares para que se autocontrolen entre sí. Hay dos que ya están y la pata que falta es la Policía Local. A principio de año el ministro la propuso en un proyecto de Ley que se debatió pero no avanzó. El ministro quedó muy decepcionado porque no salió la Policía Local en la Legislatura y el gobernador Daniel Scioli decidió crearla por decreto.

-¿Y ahora cuál es la diferencia con la Policía Local por Ley?

-La atribución y poder de policía hubieran sido trasladados a los municipios. Como esto no se hizo por Ley, se creó una Superintendencia específica dedicada a la proximidad, que es esta Policía Local, que no depende del Jefe de Policías (NdR: Comisario General Hugo Matzkin) sino que depende, por debajo del ministro, de la Subsecretaria de Planificación. Y de la Superintendencia dependerán las 50 Policías Locales. En la actual fuerza tenemos al jefe de Policías y por debajo las diferentes Superintendencias: De la Superintendencia de Seguridad dependen los jefes de Zona, los jefes de Departamentales, el jefe Distrital y de ahí el comisario. Entonces, el policía bonaerense depende de la estructura clásica pero el policía local tiene un jefe diferente y un asiento diferente: mientras el policía bonaerense va a la comisaria, el local va a ir a la Unidad de Policía Local.

-¿Y cómo conviven en un mismo territorio con las mismas funciones en la calle?

-Los dos son policías pero la diferencia es que la policía bonaerense trabaja en muchos más ámbitos y el local específicamente en la parte de proximidad. No va a hacer investigaciones, no va a hacer narcotráfico, ni comunicaciones, ni científica, va a trabajar únicamente en prevención. Y lo va a hacer según el criterio que vea cada municipio, que va a ser el que va a ir viendo dónde tiene más necesidades. Además, el policía local tiene una formación específica y no sale de su distrito, mientras que a los otros los pueden mandar a cualquier otra parte.

-¿Por qué la necesidad de crear esta nueva estructura en la Provincia y no hacerlo desde la clásica que hoy conduce el comisario Matzkin, y que dependan, por ejemplo, de los jefes departamentales o distritales?

-Porque la Local tiene un jefe de Policía Local, un coordinador civil y el intendente: Estos son los jefes. El comisario no es el jefe de los policías locales. Toda la actividad va a estar dirigida por esa mesa coordinadora y los intendentes van a poder tener en sus manos la solución para los problemas locales de seguridad que ellos ven, más allá de la tarea que realiza la policía bonaerense. Con la Policía Local se logra mucha más presencia policial en la calle. Cada intendente va a poder decir si quiere que estén en cada esquina, que sean caminantes, que anden en moto, a caballo, cuatriciclo o camioneta; depende la idiosincrasia y geografía de cada lugar.

-¿En lo diario cómo van a trabajar en conjunto las dos fuerzas?

-Supongamos que un policía local está patrullando y ve un delito que está cometiendo una persona. El policía lo aprehende y le hace un acta y luego entrega a esa persona con el acta a la comisaría. El policía local no hace más nada, su tarea con ese delincuente termina ahí y sigue patrullando. Después el acta llega al fiscal a través de la comisaría. Ahora, estamos consensuando esa acta con fiscales y jueces de garantías para que no se caiga ninguna actuación por cargar datos erróneos o que no coincidan.

-¿Qué falencias vieron en la vieja estructura de uniformados que esta nueva puede llegar a resolver o complementar?

-No es que se vean falencias, lo que pasa es que la otra estructura tiene muchas otras tareas. Ellos tienen que llevar presos a tribunales, custodiar detenidos, realizar tareas de imaginaria, en la Unidades de Policía Local no hay calabozos.

-Tampoco debería haber calabozos en las comisarías?

-Lo ideal es que cuando detienen a alguien vaya a la Alcaidía, que depende de otro Ministerio, para que ahí siga el proceso judicial. Ojalá podamos hacer grandes alcaidías que no tengan nada que ver con la Policía pero la realidad por ahora es esta. Pero siempre, por supuesto, el detenido tiene que ir preso.

-La crítica del ?ciudadano promedio? o de los medios es que hay una puerta giratoria. Los ?chorros entran y salen? y eso pasa en la comisaría.

-De acuerdo. Pero hay una teoría económica el delito que dice que el delincuente cuanto más fácil y más barato le sale delinquir lo va a seguir haciendo. Si no le ponemos trabas al delincuente no va a parar. Primero, si no prevenís; segundo, si cuando lo detenés entra y sale; y tercero, si cuando la condena tampoco la tiene que cumplir el delincuente va a seguir choreando. Como Estado tenemos que ir resolviendo cada uno de esos pasos. El primero de todos es la detención apenas está delinquiendo, después hay que seguir trabajando en los otras trabas pero nuestra función es este primer paso.

-A diferencia del resto de las fuerzas, en donde hay uniformados a cargo, en esta llamó la atención que se designara a un civil al frente ¿A qué se debe?

-Es para diferenciar que esta es una policía que no está dentro de la órbita de la estructura policial. Tiene una función diferente, una dependencia diferente y un objetivo diferente. Además, el cargo mío no es el único, tiene un cargo muy importante el intendente, que de policía no tiene nada pero tiene el conocimiento de lo que necesita su pueblo. Y la vinculación con los intendentes es tarea mucho más de un civil que de un policía. Aquí hay una coordinación con todos los municipios que es muy razonable. De hecho desde esta Subsecretaria atendemos a todos los que tienen Policía Comunal y las guardias urbanas. Es normal que haya 3 o 4 intendentes por día.

-Los intendentes no van a tener el mismo poder que hubieran tenido con la Ley ¿Cómo se pudo subsanar?

-Si bien no se pudo hacer la transferencia del poder de policía, que sigue estando en manos de la Provincia, la resolución que se firmó dice bien claro que toda la selección de los policías y toda la operatividad dependen del municipio.