CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
26-06-2015

Gremios piden a la Presidenta que intervenga en la crisis pesquera

Buscan que tome medidas para revertir la disminución de la actividad y se recupere mano de obra. Aseguran que el intendente debería ponerse al frente del reclamo.

Dicen que, hasta ahora, todos los funcionarios con los que hablaron los escucharon pero no les dieron respuesta. Hablan de unos 220.000 cajones frescos de pescado por mes que no se producen porque hay barcos que están parados. Y son muy críticos con los empresarios, a quienes acusan de no entender que los más perjudicados por la situación son los trabajadores. Por esas razones, los gremios pesqueros enviaron ayer una carta a la presidenta Cristina Fernández en la que le piden que intervenga para revertir la crisis del sector.

"Mar del Plata ha disminuido su capacidad de producir manufactura de elaboración en tierra", explica la misiva, redactada por gremios como el Simape (Sindicato Marítimo de Pescadores), el SUPA (Sindicato Unidos Portuarios Argentinos), el SOIP (Sindicato Obrero de la Industria del Pescado, el Siconara (conductores navales) y el Saonsinra (obreros navales) con el apoyo de la CGT regional.

"La Confederación General del Trabajo Regional Mar del Plata, a través de su Secretaría de Intereses Marítimos y Portuarios, con el consenso de los gremios del sector de la actividad pesquera marplatense que la componen, hace saber a usted, por medio de esta carta, de la crisis pesquera que atraviesa la industria de mayor contenido socioeconómico de esta ciudad", dice la carta.

"Los buques fresqueros de altura y costeros -agrega- han dejado de realizar la media de mareas necesarias por mes que deben hacerse para que los trabajadores, tanto embarcados (capitanes, conductores, maquinistas y marinería) como en tierra (estibadores, guincheros, fileteros, navales, administrativos, servicios y proveedores) puedan acceder a un salario digno".

Aclaran que la pesca fresquera de Mar del Plata es "una cadena compuesta por once gremios de distintas actividades que dependen directamente del fresco y el empleo" que se genera en tierra. "Hoy, en muchos casos, los frigoríficos de procesamiento de materia prima dependen de subsidios que el Estado les otorga", señalan, y aseguran que la mejor solución es el trabajo genuino.

Concretamente, los gremios le solicitan a la primera mandataria que "se obligue por los medios correspondientes a los poseedores de los permisos de pesca como de sus cuotas a realizar todas las mareas de pesca necesarias para que la economía pesquera marplatense se active en su conjunto", con la protección de la mano de obra ocupada y la prohibición de las transferencias de los cupos pesqueros entre la flota.

Según los gremios, los armadores propietarios de los buques pesqueros permisionarios de las cuotas de captura "no despachan su flota a mareas de pesca de manera contínua para sostener la actividad" todo el año, por lo que el nivel de producción está "casi en un 50% por debajo del poder real".

Apuntan que el Consejo Federal Pesquero, máximo órgano de administración del Estado en la materia, da facilidades a los armadores para devolver la cuota que consideren que no vayan a pescar. Así, el Consejo la reasigna a empresarios "que quieran aprovecharla" para "quedar exceptuados de la obligación de pescarla y no perderla para el año siguiente". Para los gremios, de esta manera se fomenta "un verdadero monopolio de la pesquería nacional, ya que los empresarios dispuestos a recibir esta reasignación son siempre, en su mayoría, dueños de buques congeladores".

Recuerdan que esta práctica está prohibida por la Ley Federal de Pesca para proteger la mano de obra ocupada en tierra. "Siguen realizando esas maniobras, lo podemos verificar en el último acta del Consejo Federal Pesquero", se quejan.

En la conferencia de prensa que compartió ayer el secretario general de la CGT regional, Pedro Fernández, con referentes de los gremios que firmaron la carta a Cristina en la sede de la central obrera, no pasaron desapercibidos los pedidos de beneficios impositivos realizados por los empresarios del sector en los últimos días. "Cuando la pesaban no decían nada. Ahora que la tienen que contar se preocupan", lanzó el propio Fernández.

En la carta advierten que los armadores de buques pesqueros "utilizan como excusa para no salir a pescar" las roturas de sus barcos. "Si así fuese, los talleres navales y los astilleros deberían estar atestados de trabajo", ironizan. Y aseguran que "el Consejo Federal Pesquero habilita esta farsa prorrogando sus inactividades más allá de los 180 días". De ahí que otro de los pedidos a la Presidenta sea que no se otorguen justificaciones de inactividad por rotura "más allá de los 90 días" con una prórroga por otros 90 pero sin "maniobras que lleven a tener paralizada la flota, como sucede actualmente".

También solicitan que se convoque a una convención de la actividad pesquera en la que participen todos los sectores (gremios, empresarios y funcionarios) "con el fin de reestructurar la pesca en Argentina, aprovechando al máximo nuestros recursos sustentables con la mayor mano de obra ocupada en tierra".

Para que sus pedidos lleguen a destino, los gremios buscarán que el intendente Gustavo Pulti se ponga al frente del reclamo. "Es el jefe político de la ciudad. El tiene llegada a la Presidenta", indicaron.