El adolescente de 15 años aprehendido el lunes 17 de agosto por asesinar a Lucas Leguizamón (19) quedó alojado en un centro de contención de Monte Grande, en el que buscará rehabilitarse de su adicción a las drogas.

La diligencia fue solicitada por la fiscal Mariana Baqueiro y ordenada por la Justicia de Garantías de manera extraordinaria. Es que el menor cuenta con dos homicidios: antes de matar de un tiro a Leguizamón, en un descampado del barrio Los Pinares, había asesinado de una puñalada a su ex cuñado, Jonatan Escobar (18), en la misma zona.

Luego de que la investigadora pidiera una medida de encierro extraordinaria, ya que por su edad es inimputable para la ley argentina, el joven permaneció alrededor de un mes y medio en el Centro de Recepción de Menores de Batán. Sin embargo, cuando se generó una vacante en el instituto de Monte Grande -uno de los mejores de la provincia de Buenos Aires, según los operadores judiciales-, se dispuso su traslado inmediato.

En dicho lugar, que cuenta con un régimen cerrado -no puede entrar y salir, ni recibir visitas que no sean autorizadas-, el adolescente se recuperará además de su adicción a las drogas. Vale recordar que, tras el crimen de Leguizamón, fue el propio padre del menor el que lo entregó a la policía para que quedara a disposición de la Justicia.

Los asesinatos con los que carga el adolescente, a tan corta edad, son dos: el primero de ellos tuvo como víctima a Jonatan Escobar y se produjo el 7 de febrero, en el marco de una pelea callejera ocurrida de madrugada. En ese momento, el menor tenía 14 años y le propinó a su ex cuñado una puñalada mortal en el pecho, tras una discusión que ambos habían mantenido en Ricardo Rojas, entre Río Negro y Falkner.

La Fiscalía del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil ordenó su aprehensión, pero luego lo sobreseyó por su inimputabilidad. Sin embargo, cuando durante la tarde del feriado del 17 de agosto el mismo joven asesinó de un tiro a Leguizamón en un descampado sito en Unamuno y Rejón, se ordenó una medida de encierro extraordinaria que aún está vigente.

En un principio, trascendió que el crimen se había producido durante otra discusión. Sin embargo, un testigo -amigo de la víctima- declaró luego que el asesino había disparado después de que Leguizamón se resistiera a ser asaltado.