BUENOS AIRES.- Dos efectivos de la policía bonaerense fueron detenidos, y desafectados de la fuerza, acusados de haber exigido dinero dentro de una comisaría de Esteban Echeverría a tres ciudadanos peruanos para no iniciarles una causa por drogas con pruebas falsas.

En un allanamiento ordenado por la Justicia en la comisaría, se secuestró una bolsa con droga que no estaba declarada y una computadora de uno de los involucrados donde, se cree, constan datos de personas a quienes ya les cobraron coimas por casos similares.

El Ministerio de Seguridad bonaerense confirmó que los dos efectivos detenidos son el oficial Cristian San Martín y el teniente primero Ignacio Velásquez, ambos de la comisaría de El Jagüel, quienes ya fueron desafectados de su cargo por disposición del ministro Carlos Stornelli.

El ministro también desafectó de la fuerza al teniente primero Andrés Fuentes Prieto, quien era el jefe de calle de esa comisaría y se encuentra prófugo de la Justicia.

Según un comunicado de prensa del Ministerio, la medida fue tomada en el marco de las políticas de "tolerancia cero" frente a hechos de corrupción por parte de policías, emanadas por el gobernador Daniel Scioli y el titular de la cartera de Seguridad bonaerense.

El hecho comenzó el sábado por la mañana cuando personal de la comisaría de El Jagüel detuvo en la vía pública a dos hombres y una mujer, ciudadanos peruanos, aparentemente por tenencia de marihuana.

Los apresados contaron en la seccional policial que se dedicaban a la confección de remeras y que esa droga que les encontraron no era suya.

Inmediatamente fueron llevados a la oficina del jefe de calle, donde, de acuerdo a los pesquisas, el oficial puso una bolsa con droga sobre la mesa y les dijo que si no le entregaban dinero les "armaba" una causa por drogas y por tenencia de dinero falso.

Allí, de acuerdo a la denuncia de los ciudadanos peruanos, el policía dejó salir a la mujer para que juntara el dinero que les habían exigido.

La mujer regresó horas después y le dijo al policía que no había podido juntar dinero sino que apenas tenía cuatro teléfonos celulares, ropa y algunos otros objetos de escaso valor.

Las tres personas lograron salir de la comisaría y momentos después se dirigieron a una fiscalía de Lomas de Zamora a realizar la denuncia.

La fiscal María Delia Recalde recibió la declaración de las víctimas y, tras avisarle a Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense, ordenó un allanamiento en la comisaría, como así la detención de los tres policías intervinientes en el hecho.

Al llegar a la comisaría, los investigadores detuvieron al oficial San Martín, quien se hallaba prestando servicios, mientras que convocaron a la seccional a los otros dos involucrados.

Se cree que los dos policías llegaron hasta la seccional y hasta estacionaron sus autos en la puerta, pero al ver el movimiento de los investigadores de Asuntos Internos salieron corriendo.

Dentro de la seccional, el fiscal secuestró en la oficina del jefe de calle Fuentes Prieto una bolsa con droga, la cual no estaba declarada y una suma de dinero, como así también su computadora notebook, en la cual consta una serie de información con nombres y números.

Los investigadores creen que esa información está relacionada a las coimas cobradas días anteriores.

Luego, los policías detuvieron al subteniente Velásquez, quien se aprestaba a ingresar a la casa de un familiar en la zona de Esteban Echeverría.

La fiscal ordenó el secuestro de los autos de los dos policías que quedaron estacionados en el frente de la comisaría, dentro de los cuales fueron encontrados más elementos de prueba, según dijo a Télam uno de los investigadores.