Un jubilado murió ayer a la madrugada en el Hospital Interzonal, después de haber sido salvajemente golpeado con una maza por un delincuente que lo asaltó en su casa y le robó 1.500 pesos y un reloj.

El violento caso ocurrió el sábado al mediodía y también resultó herida la mujer del anciano, ya que el ladrón le pegó hasta desmayarla para que confesara donde guardaba el dinero.

La víctima fue identificada como Terzino Ramundi (78), quien falleció horas después del asalto por los fuertes golpes que recibió en la cabeza.

Por el hecho, la Policía tenía montado al cierre de esta edición diferentes operativos para tratar de detener al presunto asesino, ya que se habrían conseguido datos firmes para identificarlo. Además se esperaban resultados de diferentes pericias científicas que podrían comprometer aún más al sospechoso.

El caso ocurrió el sábado al mediodía en una casa ubicada en Venezuela al 500 cuando un delincuente golpeó la puerta de la vivienda del matrimonio de ancianos y, por motivos que aún no están claros, convenció a la mujer para que le abriera. Cuando lo hizo, el ladrón la empujó, se metió dentro de la vivienda y empezó a pegarle a la jubilada de 76 años. "Le ordenaba que le dijera dónde guardaba la plata", le contó a LA CAPITAL un investigador. No le dio tiempo a hacerlo: por la paliza, la mujer cayó al piso y se desmayó. Pero el delincuente no paró ahí: fue hasta donde estaba su marido y con una maza que había llevado para cometer el robo, empezó a pegarle salvajemente. "Tuvo una violencia inusitada. Los golpes se dirigieron a la cabeza", confió una fuente cercana al caso. Por los mazazos, el hombre perdió la conciencia y cayó cerca de su mujer en el comedor de la casa.

Según pudo establecer LA CAPITAL de fuentes consultadas, el delincuente habría estado cerca de veinte minutos dentro de la vivienda con los dos abuelos en el piso. Revolvió todos los ambientes y logró llevarse cerca de 1.500 pesos y un reloj. De todas maneras, los investigadores aún no había podido obtener todas las precisiones de lo que ocurrió en la vivienda, ya que la mujer estaba bajo un fuerte estado de shock y no recordaba algunos detalles con exactitud.

Lo cierto es que una vez que el ladrón se fugó, la anciana logró recuperarse y realizó la denuncia al 911. Enseguida, llegaron hasta el lugar del hecho efectivos de la comisaría sexta. Luego, los médicos le realizaron los primeros auxilios al jubilado, quien estaba herido de gravedad, pero aún permanecía con vida. Después, fue trasladado al Hospital Interzonal, donde falleció ayer a la madrugada.

En tanto, peritos de la Policía Científica comenzaron a trabajar en la casa y levantaron huellas de la maza con la que fue golpeado el matrimonio, ya que el delincuente la dejó tirada en el piso antes de escapar. Además, los especialistas encontraron un cargador de un arma calibre 22 que se le abría caído al delincuente cuando golpeaba a sus víctimas.

Efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones también estuvieron en la escena del crimen y el caso quedó a cargo de la fiscal María de los Angeles Lorenzo.

Según pudo averiguar LA CAPITAL de fuentes extraoficiales, los investigadores ya tendrían identificado al posible asesino y al cierre de esta edición se esperaba que se realicen una serie de diligencias para tratar de detenerlo.

Además una de las hipótesis que tomaba fuerza sostenía que si bien un solo delincuente habría entrado a la casa y cometido los asesinatos, dos cómplices lo habrían estado esperando afuera para hacerle de campaña y acelerar la huida.