La policía detuvo ayer a la tarde a un adolescente de 16 años acusado de matar el domingo de un escopetazo a un nene de 9 años que jugaba con su hermano en una casa del barrio Santa Rosa del Mar.

Los efectivos de la comisaria decimotercera atraparon al joven después de permanecer durante más de un día prófugo. Lo detuvieron cuando estaba volviendo a la casa donde sucedió el crimen y luego lo trasladaron al Centro de Recepción de Menores. Se espera que hoy a la mañana la fiscal Mariana Baqueiro le tome declaración.

El móvil del crimen todavía no está claro: en principio se especuló con un accidente, pero con el correr de las horas los investigadores descubrieron situaciones que no hacen "cerrar" la hipótesis de un asesinato por error. Por esto, la causa sigue caratulada como homicidio.

El caso sucedió el domingo a las 15 en una casa ubicada en calle 62 y 449. En ese momento, jugaban José Mateo Urquiza (9) y un amigo de la misma edad. En el ambiente también estaba un adolescente de 16 años -hermano del amigo de la víctima- que manipulaba una escopeta.

En un determinado momento, el joven le pidió a su hermanito que vaya a comprar cigarrillos y se quedó sólo con Urquiza. En esas circunstancias, se produjo el disparo de escopeta que le dio en la cara al nene de 9 años y lo mató en el acto. No había testigos en el momento que ocurrió el hecho. Unos minutos después, llegó del kiosco el hermano del adolescente y entró en un crisis nerviosa.

Una vez cometido el hecho, el joven de 16 años metió el cuerpo de Urquiza en una bolsa y lo arrojó en un descampado ubicado a cien metros de la escena del crimen. Después, tomó la escopeta y escapó.

La familia del adolescente se enteró del hecho y denunció el crimen al 911. La fiscal Mariana Baquiero y la policía científica llegaron hasta el lugar y encontraron el cuerpo de Urquiza en un descampado.

A partir de ese momento, los investigadores pudieron determinar que la casa donde ocurrió el crimen era de la hermana del acusado, que sólo vivía ahí de manera circunstancial. Además, la pareja de la mujer declaró que el joven había llegado a la mañana con la escopeta. Y que la víctima era un vecino que vivía a sólo dos cuadras del lugar.

Estas declaraciones, sumado a no haber testigos presenciales, hicieron poner en duda la hipótesis que el disparo se había escapado por casualidad. Y no sólo eso: que el adolescente haya tratado de esconder el cuerpo de la víctima también complica más su situación.

La detención

Una vez ocurrido el crimen, los investigadores comenzaron a buscar al acusado y obtuvieron una serie de pistas sobre los posibles lugares donde podía estar escondido. Pero también hicieron una custodia de la casa donde ocurrió el crimen. Finalmente ayer a la tarde, el adolescente estaba volviendo a su casa y en ese momento fue detenido y quedó formalmente acusado de "homicidio".

Por otra parte, el cuerpo de Urquiza fue velado ayer y hoy recibirá cristiana sepultura. Por el luto, en la escuela 44 no habrá clases.