Como en una película, el peligroso ladrón de bancos Sergio Adrián Cortese (42) planificó con paciencia su fuga de la Unidad Penal de Batán. Y ayer la ejecutó: cuando ingresó a la unidad de cuidados coronarios del Hospital Interzonal de Agudos para hacerse un chequeo del corazón, tres cómplices disfrazados de médicos lo esperaban. Golpearon al guardia que lo custodiaba y escaparon con el hombre acusado de liderar una banda mixta integrada por civiles y policías.

Según pudo confirmar LA CAPITAL, era habitual que Cortese saliera de la cárcel para hacerse chequeos del corazón, que eran autorizados por la Justicia de San Isidro. El último había sido el viernes pasado cuando lo atendieron en una clínica privada.

Cortese es un acaudalado empresario del rubro del transporte de carga, muy vinculado a una importante automotriz de capitales franceses, que había sido detenido y acusado de ser el jefe de una banda delictiva mixta, integrada por civiles y policías federales y bonaerenses. Se cree que su banda fue la que robó 600.000 pesos en una sucursal que el Banco Santander Río de General Pacheco.

La fuga

Según pudo reconstruir LA CAPITAL, Cortese ya venía siendo atendido por problemas del corazón. Por eso ayer a la mañana, tras la autorización de la justicia de San Isidro, fue trasladado desde la Unidad Penal XV de Batán hasta el Hospital Interzonal de Agudos. Al llegar, Cortese fue acompañado por un guardia hasta la unidad coronaria para hacerse los controles de rutina. Ahí se concretó la fuga. Tres cómplices que lo esperaban disfrazados de médicos, golpearon con furia al guardia, y escaparon caminando. Salieron por la puerta del hospital como si llevaran a un paciente. "Creemos que escaparon en un auto negro porque fue lo único que pudieron ver los testigos. Pero estamos en plena etapa de investigación", confió ayer una fuente consultada por LA CAPITAL.

Cortese había sido atendido el viernes pasado en una clínica privada de la ciudad y era habitual que fuese trasladado a hacerse chequeos del corazón. Por eso los investigadores creen que tuvo tiempo para planear la fuga y hacerlo de una manera que no levantara sospecha.

De todas maneras, la fuga es investigada por el fiscal Paulo Cubas, quien también buscará determinar si hubo otros complicidades para asegurar la huida.

Peligroso ladrón

Cortese fue detenido el 4 de marzo de este año por los investigadores de la Jefatura Distrital de Tigre en el Barrio Los Hornos de La Plata. Lo acusan de ser el cabecilla de la organización de civiles y policías que el 3 de junio de 2010 robó de 600.000 pesos del Banco Santander Río ubicado en la avenida Hipólito Yrigoyen al 700, a 50 metros de la comisaría de General Pacheco. Durante el procedimiento para detenerlo, la policía también allanó una casa ubicada en la localidad bonaerense de Villa Tesei, donde se capturó a un tío de Cortese que era ex policía federal.

En esa vivienda, los investigadores incautaron un fusil FAL con 40 municiones, una pistola 3.80 dotada de balas de punta hueca, una pistola Glock 9 milímetros y una ametralladora FMK-3 de igual calibre. Además se encontraron uniformes policiales, chalecos antibala, inhibidores satelitales y equipos de comunicación.

Cortese era conocido por alquilarle vehículos a una compañía de transporte de carga, que tiene sedes en Don Torcuato y Tierra del Fuego. También relacionado a una firma automotriz de origen francés, a la cual le alquila un predio en el partido de Tres de Febrero.

Una vez detenido, Cortese quedó a disposición del fiscal de Tigre, José Ignacio Amallo, que depende del departamento Judicial de Tigre. El peligroso ladrón de bancos tenía prisión preventiva y fue trasladado a la Unidad XV de Batán a la espera de su juicio. Ayer, como en una película, logró escaparse y ahora es buscado por toda la Policía de la provincia de Buenos Aires.