BUENOS AIRES - Un tribunal oral porteño dará a conocer hoy el veredicto en el juicio que se le sigue a un joven acusado de asesinar de un balazo a Leandro Ismael Laime durante un intento de robo cometido en 2009, en un locutorio del barrio de Villa Lugano.

La audiencia comenzará a las 11, en la planta baja del edificio judicial situado en Paraguay 1536, cuando el imputado Miguel Angel Nieva (21) tenga la oportunidad de pronunciar sus "últimas palabras".

Luego, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 25 de Capital Federal, integrado por los jueces Carlos Binda, Rodolfo Bustos Lambert y Ana Dieta de Herrero, dará a conocer su veredicto.

En los alegatos de la semana pasada, el fiscal Horacio Michero pidió que Nieva sea condenado a prisión perpetua al acusarlo de los delitos de "tentativa de robo, portación ilegal de arma de guerra y homicidio criminis causa" en perjuicio de Laime (18).

El fiscal dijo que en el debate "quedó comprobado que el imputado ingresó al locutorio (propiedad de la familia de Laime) con fines de robo y vio frustrado ese intento por la resistencia de la víctima y al huir efectuó un disparo".

Michero resaltó los testimonios de José Alfredo Vargas Ramos, primo de Laime y que estaba dentro del local al momento del crimen; de Héctor González, chofer de una remisería ubicada enfrente; y de Ricardo Rojas, dueño de un cíber situado a la vuelta de la esquina.

Estos testigos vieron un Fiat Palio bordó que iba por la calle José León Suárez hacia Zuviría, dio una vuelta en U, quedó de la mano donde estaba ubicado el locutorio y vieron descender del vehículo al acusado.

Además, el fiscal señaló que ese vehículo fue encontrado días después por policía en el interior de la villa de emergencia "Ciudad Oculta", donde estaba siendo "desmantelado".

En aquella oportunidad, los policías fueron recibidos a balazos y pidieron refuerzos, lo que provocó la huida de los delincuentes.

Michero aseguró que los peritajes determinaron luego que tres de las vainas servidas encontradas allí coincidieron con la hallada en la escena del crimen, por lo que ambos hechos fueron cometidos por una misma pistola calibre 9 milímetros.

A su turno, Matías Salimbeni, abogado de la querella, coincidió con el pedido de pena del fiscal y se refirió a los mismos testigos citados por el representante del Ministerio Público.

El letrado recordó que Vargas Ramos declaró que el autor del homicidio había sido "Miguelito", tal como era conocido el imputado en el barrio Piedrabuena de Villa Lugano.

El abogado también remarcó los dichos de Rojas, quien contó que una semana antes del crimen Nieva ingresó al cíber y tras ponerle "un arma en la cabeza" le robó entre 400 y 500 pesos.

Por su parte, Carina Bozzolo Pintos, defensora de Nieva, solicitó la absolución por el "beneficio de la duda" al asegurar que durante el juicio hubo "notorias contradicciones" entre los tres testigos clave.

Además, la abogada destacó que varios testigos presentados por su parte aseguraron que a la hora del crimen, Nieva comía un asado en otro lugar, tras haber ido a la cancha de Nueva Chicago.