Gremios, cámaras pesqueras y autoridades nacionales volverán a tener hoy, a las 11, una audiencia en la Secretaría de Trabajo en busca de destrabar el conflicto que tiene paralizada a la flota tangonera congeladora, que no comenzó la temporada de langostino en aguas nacionales.

La situación se originó luego de que, semanas atrás, las cámaras pesqueras solicitaran rebajar un 30% el ítem salarial por producción de los marineros. En Mar del Plata, esta medida impactaría en más de 250 trabajadores.

Los empresarios esgrimieron que sacar un barco da rentabilidad negativa en un contexto en el que el precio internacional del langostino entero cayó un 2,8% a nivel interanual y las colas de langostino, un 5,6%. En la misma línea, resaltaron que los costos “internos continúan en ascenso”.

Según mencionaron, el convenio colectivo de trabajo que regula la actividad es de 2005 y estableció, además del básico, un bono por productividad anclado en el precio internacional del langostino de entonces, cuando era de U$S12 el kilo. Mientras que ahora vale U$S5,50 el kilo y la tripulación “continúa cobrando como si valiera U$S 12”, indicaron.

Frente a este escenario, reclamaron una reformulación del convenio colectivo existente. El principal cambio es reducir el salario por producción en un 30%.

Desde comienzos de este mes se llevaron a cabo diversos encuentros entre las partes. Y hasta ahora no hubo una solución. Los gremios se pusieron firmes en su postura de no aceptar ninguna rebaja salarial, mientras que las empresas exhibieron los números que marcan los costos elevados para poder operar.

Una opción que se maneja como alternativa, al menos en forma provisoria, es avanzar con algún tipo de alivio fiscal para las empresas, sin que ello implique una reducción en los sueldos.

Esto podría materializarse con la homologación de un acuerdo entre las partes que habilite que sumas o conceptos salariales adquieran carácter “no remunerativo”. De esta manera, las empresas tendrían que abonar menos cargas patronales.

“Las autoridades de la Secretaría de Trabajo mostraron buena predisposición y están viendo cómo darle curso y articular esa posibilidad. Sería una medida provisoria para que los barcos puedan empezar la temporada en aguas nacionales”, apuntaron fuentes gremiales.

Para la audiencia de hoy, se espera la presencia del SOMU (Sindicato de Obreros Marítimos Unidos), Simape (Sindicato Marítimo de Pescadores), el Siconara (Sindicato de Conductores Navales de la República Argentina), el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y de Cabotaje Marítimo y la Asociación de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca .

En representación de la parte empresarial estarán Capeca (Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina), Capip (Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras) y CEPA (Consejo de Empresas Pesqueras de Argentina).