Por Ramiro Melucci

Fueron más de dos meses. Desde antes de las elecciones de septiembre hasta después de las de octubre. Guillermo Montenegro dejó hacer. Leyó que se venían algunos cambios en el organigrama municipal. Escuchó que se pensaba formar un gabinete sub 40. Se enteró de las reuniones en las que se barajaban nombres para el próximo gabinete.

Algo de lo que leyó, escuchó o se enteró no le gustó. Las versiones difieren en este punto. Hay quienes sostienen que no fue un simple enojo, sino que enfureció. Y en los primeros días de noviembre decidió intervenir.

El intendente cortó en seco los rumores de cambio. Fue su futuro reemplazante, el concejal del PRO Agustín Neme, el encargado de ratificar la continuidad de la gestión.

Cerca del jefe comunal dicen que nunca estuvo en los planes otra hoja de ruta. Que siempre se pensó en mantener el poder local, aunque cambiara el intendente. “Si alguien imaginó otra cosa, se equivocó”, aseguran.

Lo cierto es que ese cambio en la etapa de transición operó en el mismo momento en que se diluían las posibilidades de que Montenegro fuera elegido por Javier Milei para ocupar un lugar en el gabinete. Coincidió con la designación de Diego Santilli como ministro del Interior, con la continuidad del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, y con las definiciones para Seguridad y Defensa. A medida que se alejaba de un ministerio, Montenegro ajustaba clavijas en el municipio.

Hoy, en la mesa chica del intendente el primer reflejo de respuesta a la pregunta sobre qué va a cambiar es “nada”. Suena, y es, una exageración para enfatizar la continuidad. Porque cambiará el titular del Ejecutivo y algunos nombres del gabinete. Porque ganará terreno La Libertad Avanza y habrá un repliegue del radicalismo. No es poco.

Lo que no va a cambiar es la jefatura política del oficialismo local, encarnada en Montenegro. El próximo senador provincial influirá sobre el gabinete. Dejará a sus leales y tiene poder de elección o veto en los reemplazos. Manejará el bloque del PRO en el Concejo Deliberante y será el eje de los vínculos entre los diversos actores políticos y sociales.

Cerca del jefe comunal dicen que nunca estuvo en los planes otra hoja de ruta. Que siempre se pensó en mantener el poder local: “Si alguien imaginó otra cosa, se equivocó”.

La decisión de tomarse licencia a partir del 10 de diciembre define a Neme como intendente interino y deja flotando en el ambiente la posibilidad de un regreso. Sobre todo si no obtiene hacia el próximo turno electoral la notoriedad necesaria para mostrarse como opción en la provincia. Está claro que Santilli sacó ventaja en la carrera por la gobernación y que la Legislatura bonaerense no es el mejor lugar para lucirse. Se seguirá mostrando todo lo que pueda con el “Colo” y con Cristian Ritondo, pero la hipótesis del regreso se fortalecerá o debilitará de acuerdo a si lo convocan o no en algún momento para el Gobierno nacional.

A Alejandro Carrancio no se le pasa por la cabeza que la no designación de Montenegro en un ministerio sea un problema para el desembarco de La Libertad Avanza en el municipio. Siempre repitió ante quien quisiera escucharlo que nunca estuvo sobre la mesa de negociaciones electorales ningún ministerio. Que Montenegro “cobró” con el primer lugar en la lista de senadores provinciales y en la de concejales, que encabezó Fernando Muro.

Por eso el libertario espera ocupar, a través de dirigentes de su confianza, algunos casilleros del gabinete local y la presidencia del Concejo Deliberante. Ciertas definiciones vienen a mayor ritmo que otras, pero todas, de alguna manera, registran avances.

Carrancio tiene varios casilleros marcados en el calendario. El del miércoles 3 de diciembre, cuando jurará como diputado nacional. El del viernes 5, cuando pretende ver la entronización de Emiliano Recalt en el Concejo. Y el del domingo próximo. Junto con el presidente de La Libertad Avanza en la provincia, Sebastián Pareja, organiza un encuentro en Mar del Plata en el que reunirán a diputados nacionales, legisladores provinciales, concejales y coordinadores distritales. Una demostración de fuerza de los “territoriales” frente a “las fuerzas del cielo” que coronará la presencia de Karina Milei. Los legisladores del PRO no están invitados; Montenegro sí. Piensa ir “como intendente de Mar del Plata”.

 La hipótesis del regreso se fortalecerá o debilitará de acuerdo a si lo convocan o no en algún momento para el Gobierno nacional.

El período que se iniciará el 10 de diciembre, singular en la historia de Mar del Plata (ningún intendente pidió licencia para asumir en otro cargo), asoma además con serias dificultades económicas. Después de avisar que pagará salarios con fondos afectados, el gobierno local comenzó la paritaria con el sindicato municipal. De las reuniones participan el secretario de Legal, Técnica y Hacienda, Mauro Martinelli, y los secretarios general y adjunto del STM, Daniel Zacarías y Cristian Milasincic. El gremio, que venía de denunciar en el Ministerio de Trabajo pagos desdoblados y fuera de término, y de advertir que no está garantizado el aguinaldo, se llamó a silencio.

En la provincia también se hacen cuentas. Axel Kicillof reclama el presupuesto y el paquete de financiamiento completo. Una parte avanzó y otra (el endeudamiento) permanece en comisión. Es un aspecto clave para la comuna porque el 8% de los recursos derivados del nuevo financiamiento irá a los municipios.

Mar del Plata no es una isla. Varios intendentes reclaman que el porcentaje no solo pueda utilizarse para la ejecución de obras, sino que se habilite su uso para gastos corrientes. Advierten sobre la baja de la coparticipación y las dificultades para pagar sueldos. 

En la discusión, que se retomará esta semana con final abierto, incide la interna peronista, la disputa por la presidencia de la Cámara de Diputados y las negociaciones con la oposición por cargos en diversos organismos del Estado.

Gustavo Pulti no tardó en bancar los proyectos de Kicillof y cuestionó a los diputados que votaron el presupuesto y la ley fiscal “pero no quisieron autorizar el acceso al crédito”. Otro dirigente local, el radical Diego Garciarena, le recordó que “en el camino de la búsqueda de consensos la prudencia suele ser buena consejera”.

Reunión de dirigentes sindicales y fomentistas en ADUM.

Mientras, el Movimiento Derecho al Futuro dio la primera señal de que pretende discutir la conducción del PJ local. Raúl Calamante reunió a dirigentes históricos como Juan Garivoto y Daniel Rodríguez, gremialistas y fomentistas bajo la consigna de “poner al PJ al servicio de marplatenses y batanenses”, en un claro mensaje contra el camporismo, que manda en el partido a través del lucifuercista Eduardo Coppola.

Pulti planifica otro mensaje. Todavía no dijo si asumirá como concejal o continuará como diputado provincial. Pero ya tomó la decisión y piensa anunciarla junto a Kicillof en la primera semana de diciembre, unos días antes de la sesión preparatoria del Concejo. Algunos podrían sorprenderse.