por Laura Capriata

El gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi, dijo hoy que el acuerdo fiscal al que llegaron la Nación y las provincias “hubiera sido imposible” durante el kirchnerismo porque en ese momento hubo “garrote y sumisión”.
En una entrevista con Télam, se declaró además esperanzado en que este nuevo consenso sea sólo el inicio “hacia la construcción de un país federal”.

Colombi elogió las reformas que encara el presidente Mauricio Macri, especialmente el consenso fiscal que se acordó con gobernadores de todo el país.

“Con el kirchnerismo esto hubiera sido imposible. Todo era garrote y sumisión. Yo estaba solo, con 22 gobernadores sometidos y nadie podía hablar, no había diálogo”, consideró el dirigente radical, que es parte del frente oficialista Cambiemos.

“Ahora eso no existe. El diálogo permitió este acuerdo. Imaginate, los gobernadores le pudimos decir al propio Presidente ‘en esto no estamos de acuerdo, busquemos otra solución'”, comparó el correntino en diálogo con esta agencia.

– ¿Y en términos generales cómo evalúa el acuerdo?

– Puede marcar una nueva relación no solo entre la provincias y la Nación sino para el país en general, se están sentando bases muy importantes que son necesarias. Todos tuvimos que ceder algo. Lo importante es que esto se dio en una marco muy importante de consenso y diálogo, cosa que antes no había. Repito: nos juntamos los 23 gobernadores a decirle al Gobierno en qué no estábamos de acuerdo, fue algo inédito. Ha primado el interés nacional.

– ¿Cómo describiría esos días de debate?

– Fueron discusiones largas, de alto contenido, un debate intenso. Eran 23 realidades diferentes. Fue muy importante la presencia de funcionarios políticos como (el ministro del Interior, Rogelio) Frigerio y su equipo, eso facilitó mucho las cosas. Después venía Hacienda pero las cosas ya estaban habladas.

– ¿Era más difícil ser oficialista que opositor en esa discusión?

– Por supuesto. El gobernador Juan Schiaretti (Córdoba) tuvo un discurso muy reconfortante. Con su hombría y su valor nos felicitó a los tres gobernadores de Cambiemos, por acompañar la propuesta del Gobierno y ser partícipes desde el principio. Y resaltó lo difícil que es ser oficialista porque hay que defender cuestiones que no acordás en su totalidad.

– ¿Fue una victoria política de Macri?

– Fue una victoria política de todos. Sin acompañamiento no había acuerdo. El resultado electoral fue importante y la impronta que le dio el Presidente también.

– ¿Qué opina de las otras reformas que impulsa el Gobierno?

– La reforma laboral tiene mucho que ver con marcar el camino a un país diferente. La economía debe crecer y con la reforma apostamos a un futuro totalmente diferente de lo que hemos transitado. El Gobierno no sólo buscó acuerdo con los gobernadores, sino con sectores que estaban en sus antípodas, y encontraron un punto común.

– ¿Cómo fue la discusión por la reforma previsional?

– Apareció el senador Pichetto (Miguel, jefe de la bancada peronista) y dijo que así no, pero que había que buscar entre todos otro camino y mejorarla. Así se acordó la reforma de los artículos entre todos y hoy la reforma jubilatoria tiene el aval de los gobernadores.

– ¿Cómo sigue ahora el acuerdo?

– Esto no termina acá, es el inicio, hay que seguir construyendo un país mucho más federal. Estoy de acuerdo con los beneficios que consiguió la provincias de Buenos Aires, ahora hay otras 22 realidad que deben ser contempladas, porque todavía hay asimetrías.

– ¿Cómo cuáles?

– Hay que terminar con las diferencias tarifarias donde la capital y Buenos Aires tienen subsidios que no tenemos nosotros. En Corrientes un tubo de gas de 40 kilos vale 2500 pesos. ¿Cuánto tienen que consumir en Buenos Aires para pagar 2500 pesos de gas? El combustible sigue siendo diferencial. Lo pagamos mucho más caro, por flete y transporte. No es fácil producir a 1000 km del puerto de Buenos Aires. Pero este fue el inicio para profundizar el país federal que queremos.

Télam.