Un numeroso grupo de concejales mantuvo ayer una reunión con el intendente Carlos Arroyo, en el marco de una jornada agitada en el municipio. La decisión de cerrar las puertas del palacio comunal e impedir la entrada y la salida, generó la intervención de los concejales que fueron a pedirle explicaciones al intendente por esa decisión. El encuentro duró alrededor de una hora, hubo momentos de tensión y finalmente, ante la falta de respuestas concretas por parte de Arroyo, la mayoría de los ediles se levantó y abandonó la reunión.

Participaron del encuentro los concejales Daniel Rodríguez, Marina Santoro, Verónica Lagos, Virginia Sívori, Marcos Gutiérrez y Balut Tarifa Arenas, de Unidad Ciudadana; Vilma Baragiola, Natalia Vezzi y Cristina Coria, de la UCR, Ariel Ciano y Mercedes Morro, del Frente Renovador, Mauricio Loria y Guillermo Sáenz Saralegui, de Agrupación Atlántica y Santiago Bonifatti, de Sumar Mdp.

Además de la polémica decisión de bloquear el acceso al municipio, también los ediles exigieron una solución al conflicto que mantiene el Ejecutivo con los empleados del Concejo Deliberante, por el que no hay sesión desde hace más de un mes.

Duras críticas al secretario ausente

Arroyo admitió en el encuentro haber dado la orden de cerrar la puerta del municipio, pero negó rotundamente que su directiva haya estado dirigida a concejales y funcionarios. Los concejales pidieron una solución “urgente” y consideraron que peligra “la institucionalidad”. Responsabilizaron a Hernán Tillou por el hecho de no permitir ni el ingreso ni la salida de ediles.

Además, resaltaron que tras el pedido de interpelación a los funcionarios Hernán Mourelle y Luis Distefano, quedó “latente” el pedido de interperlación al propio intendente

Por otra parte, los ediles le pidieron al intendente que se destrabe la situación de los trabajadores del Concejo Deliberante. Desde junio del 2018, hay un decreto firmado por el Concejo Deliberante que indica el reencasillamiento de los empleados, sin embargo, el intendente no lo ejecuta.

“Nos mareó con muchas explicaciones técnicas y administrativas pero no aclaró nada”, contó uno de los ediles que participó de la reunión.

Ante la falta de respuestas, los concejales adelantaron que es probable que se inicie una acción judicial. “Creemos que la instancia administrativa y el diálogo, están agotados”, señalaron.

Asimismo, pudo saberse, hubo críticas generalizadas al secretario de Hacienda, Hernán Mourelle, a quien indican como originante del conflicto. “No voy a permitir que venga un Juan de los palotes a ofendernos” aseguró Guillermo Sáenz Saralegui, presidente del Concejo Deliberante. Daniel Rodríguez, de Unidad Ciudadana, calificó como “grave” la situación, mientras que Santiago Bonifatti dijo que “hay un agravio y un desprestigio constante hacia el Concejo Deliberante liderado por un funcionario de este gobierno”, en relación claro está a Mourelle. “Todo esto es por el capricho de un funcionario y todo tiene un límite. ¡Cumplan con lo que prometen!” pidió casi a los gritos el concejal Ariel Ciano, al tiempo que la radical Cristina Coria también se refirió a Mourelle, sin nombrarlo. “Vos tenés algunos funcionarios que tiran nafta al fuego. Ya nos ha tratado de vagos, de lobistas, y ni hablar del tema que tiene con las mujeres. Acá se ha perdido la capacidad de diálogo”, enfatizó y aclaró que “el irrespetuoso acá no está”.

“Sentimos que vienen por nosotros, tirando demasiado de la soga. Tu compañero de gabinete -le dijo Bonifatti al secretario de Gobierno, Alejandro Vicente- tiene mala leche cuando dice que nosotros costamos un millón de pesos”, antes de retirarse ofuscado al tiempo que Vilma Baragiola reclamó que el decreto 270 (de reencasillamiento de once trabajadores del Concejo) sea respetado, ya que “fue una decisión de presidente Sáenz Saralegui que representa a 24 concejales. Somos un poder independiente”, sentenció.

Precisamente Sáenz Saralegui, fundador del partido del intendente dijo que nunca un intendente, en 35 años de democracia, había rechazado una medida así dispuesta por el Concejo. “Estamos entre un conflicto generado por un muchacho que no es de la ciudad, que busca petróleo abajo del agua y que está complicando demasiado la situación”, concluyó el presidente del Concejo, acusando también sin nombrar al polémico secretario de Hacienda.

¿Y dónde está Mourelle? 

Llamó la atención la ausencia del secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, en las reuniones que representantes del departamento Ejecutivo mantuvieron con la cúpula del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM), tanto para la mañana como para la tarde, en la sede de la delegación local del Ministerio de Trabajo.

Tampoco el polémico funcionario acompañó al intendente Carlos Arroyo en la reunión que éste mantuvo con mas de una docena de concejales de distintas fuerzas políticas en el despacho principal de la comuna, poco después de que se decidieran cerrar las puertos del edificio municipal.

En el palacio municipal se multiplicaron las versiones sobre la ausencia de Mourelle. Un funcionario del equipo del intendente no ocultaba su malestar y preocupación por e clima de tensión que se vivía frente a la comuna, y señalaba que “nadie sabe nada, aunque algunos dicen que se fue a Europa en las últimas horas”. Dicha situación no pudo ser confirmada.

“Dejó este incendio y se fue”, reveló con cierta ironía un concejal de Cambiemos, tras retirarse del despacho principal. Sin embargo, todos se preguntaban lo mismo: “¿Y dónde está Mourelle?”