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Policiales 28 de diciembre de 2019

El ingenio y destreza de un piloto que evitó un desastre aéreo

La aeronave que había despegado desde San Fernando y no pudo aterrizar en el aeropuerto por los desperfectos y las condiciones climáticas de Mar del Plata, pudo finalmente terminar su recorrido planeando en un campo cubierto de maíz a unos 1000 metros del casco urbano de Otamendi. Las maniobras del experimentado piloto, evitaron una tragedia.

MIRAMAR (Corresponsal).- El jet con matrícula LV-FQD, con nueve pasajeros, había despegado cerca de las 7:25 desde el aeropuerto de San Fernando y tenía como destino la estancia “La Venancia”, camino al paraje  “Las Piedritas”, ubicado a unos 12 kilómetros del cruce a Comandante Nicanor Otamendi.

Según confiaron fuentes investigativas a LA CAPITAL, el propietario de la estancia, de origen español, soía viajar regularmente  de esa manera y pese a que esto último no fue confirmado, se estima que acudían al lugar para pasar las fiestas de fin de año.

Todo marchaba bien hasta que las adversas condiciones climáticas comenzaron a preocupar a la tripulación, más aún cuando según el propio piloto “los motores se atrancaron en pleno vuelo y no se pudieron re encender” por lo que intentar aterrizar en condiciones normales en el aeropuerto “Astor Piazzola” de Mar del Plata era imposible.

Sabiendo también que cada vez el avión perdía más altura, sólo se mantenía planeando y no había chances  de que llegara a la pista de “La Venancia”, por la lluvia y sin visibilidad, según el piloto, “hubo que buscar un descampado”.

El lugar elegido fue un predio cubierto de maíz a pocos metros de la planta urbana, donde finalmente la nave tuvo un aterrizaje forzoso, recorriendo prácticamente en línea recta varios metros hasta detenerse, no muy lejos de una arboleda lo que de terminar allí hubiese sido una real tragedia.

La situación dejó un gran susto para los pasajeros quienes a pesar de la dramática situación terminaron ilesos.

De acuerdo a informaciones llegadas a este diario, la última señal del radar había sido alrededor de las 8:23 por lo que se elaboró un protocolo de emergencia para encontrar su paradero.

Tras la señal de emergencia, acudieron al lugar, integrantes de policía rural de Otamendi y el cuerpo de bomberos de esa localidad, junto de campos de la zona. El acceso no fue fácil ya que las intensas lluvias trajeron numerosas complicaciones en la zona y sólo se puedo ingresar en 4×4.

Una vez auxiliados los pasajeros se determinó que se encontraban en buen estado de salud.

Destino del jet

El accidente quedó en manos de la Junta Nacional de Accidentes perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina. Tras los peritajes que se realizaban este sábado por la tarde, se comprobarán oficialmente las causas del accidente.

Luego llegará el momento de retirar la aeronave del lugar, la cual según versiones de expertos en la materia, “podría quedar inutilizable debido a que por protocolo de aviación más allá de la gravedad o no de los daños, se obliga a desmantelarla íntegra y ese proceso sería igual o más costoso que la adquisición de otra unidad de esas características”.