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La Zona 30 de septiembre de 2016

Una familia acampa al lado de la Municipalidad en busca de una casa

Es un matrimonio con una beba que no tiene dónde ir. Hace dos meses habían pedido una vivienda en la comuna.

BALCARCE (Corresponsal).- En la tarde del jueves una familia decidió alojarse en una carpa en un edificio abandonado que se encuentra contiguo a la Municipalidad en busca de una vivienda para vivir.

Se trata de una pareja con una beba de 15 meses que supuestamente no tienen dónde alojarse y esa situación extrema la llevó a montar una carpa en el hall de ingreso del edificio que ocupara hasta hace unos años Clínica Balcarce.

La familia está compuesta por un trabajador de prensa, Guillermo Cornejo, quien hasta hace un tiempo dirigía una radio de frecuencia modulada, su esposa y su pequeña hija.

Según Cornejo, hasta hace unos días vivían en un terreno en la zona de avenida Suipacha entre 3 y 5 que era prestado por un familia pero que, por distintos motivos, lo tuvieron que devolver.

“Desde el Departamento Ejecutivo nos prometieron una casa para poder vivir. Se van a cumplir dos meses y todavía no obtuvimos una respuesta concreta”, indicó el periodista.

Y luego agregó que ante la falta de respuestas decidieron instalarse y pasar la noche en la carpa y que no se moverán hasta tanto llegue la solución, o sea les entreguen una casa para vivir. La familia continuará acampando allí, a escasos metros de la oficina del intendente Esteban Reino.

“Lamentablemente y dolorosamente decidimos tomar la decisión de armar la carpa porque no tenemos lugar donde estar. Nos prometió una vivienda el Municipio y hasta ahora no hemos tenido respuesta”, contó Cornejo.
Asimismo, recordó que “acudimos a la Secretaría de Desarrollo Social y también a la Dirección de Vivienda y nos dieron 10 bolsas de cemento, cuando saben que eso nos sirve de poco y nada”.

La decisión de llevar a cabo el reclamo de esta manera fue la única que encontró Cornejo y su familia a la problemática que están padeciendo. En las últimas semanas estuvieron alojados en viviendas de familiares pero era imposible continuar allí porque no había comodidades suficientes.

“Nos quedaremos acá hasta que el Municipio nos de una respuesta. Queremos la vivienda que nos prometieron. Nos iremos cuando comience la obra. Esta es la única forma de que podamos ser oídos”, aseguró Cornejo.