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El País 6 de junio de 2019

A 20 años de una verdadera hazaña náutica argentina

Alfredo Barragán, Horacio Giaccaglia y Jorge Iriberri recorrieron 1600 km en 61 días y cruzaron el mar en las embarcaciones más pequeñas que jamás lo hayan hecho.

Como dice el tango: ” Volver, que 20 años no es nada…”, y más si viene de la mano del Capitán Barragán, un romántico emprendedor que ha llevado a la exploración y al deporte argentino a lo más alto del reconocimiento mundial.

Cada expedición tiene una historia y un mensaje educativo que hace reflexionar a la humanidad.

Esta expedición fue quizás la más dura, por la planificación y por el esfuerzo que tuvieron que hacer los integrantes del CADEI. Alfredo Barragán (50), Horacio Giaccaglia (54) y Jorge Iriberri (52) partieron el 1 de abril de 1999, recorrieron 1600 km en 61 días, y cruzaron el mar en las embarcaciones más pequeñas que jamás lo hayan hecho.

El CADEI quedará en la historia por ésta y otras tantas expediciones, entre las que se encuentran: La Expedición Atlantis, El Cruce de los Andes en Globo, Aconcagua, Kilimanjaro y Antártica Finis Terra.

En tres kayaks de travesía individuales, de 5,10 metros, sin embarcaciones de apoyo, con vientos y corrientes trasversales, unieron 23 islas de 12 países, partiendo del puerto de Macuro de Venezuela y arribando a San Juan de Puerto Rico el 31 de mayo de 1999.

A diferencia de otras grandes expediciones en kayak ésta no recorrió la costa, sino que cruzó el mar.
Remaban llevando el equipamiento mínimo necesario y haciendo entre 5O y 150 km en cada travesía. Los trayectos cortos les insumían unas 14 horas de remo y dormían en playas desiertas al llegar a tierra firme. Al zarpar de Tobago, un gran temporal los hizo derivar demasiado hacia el oeste y estuvieron 40 horas remando al límite de su capacidad física y psíquica. Luego de dos jornadas dramáticas, lograron encontrar y arribar exhaustos a Grenada, la meta salvadora, escribiendo así una página gloriosa en la historia del deporte y la navegación.