Tras varios meses de negociaciones, el SOMU acordó con las cámaras empresarias y se reanudará la actividad en la pesca del langostino que estaba paralizada.
Luego de varios meses de negociaciones, se destrabó el conflicto en la flota congeladora de la pesca y en las próximas horas se reanudará la actividad.
El Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) anunció ayer que se logró un acuerdo salarial con las cámaras empresarias por lo que se reactivará la pesca de langostino que estaba prácticamente paralizada.
“Se llegó a un acuerdo con las cámaras pesqueras, el acta se firmará en el día de mañana (por hoy) y en los próximos días estarán convocando a las tripulaciones para salir a navegar”, indicó el sindicato en un comunicado. Y agregó: “Queremos agradecer a todos los marineros pescadores que defendieron sus derechos que estuvieron haciendo el aguante a lo largo del país y a nuestros dirigentes que acompañaron a los afiliados en defensa del CCT”.
Si bien no se anunciaron los detalles del acuerdo, trascendió que el acuerdo contempla la aplicación del esquema de tripulación 70/30, un descuento del 9% sobre el total del recibo —incluyendo fijos y producción— lo que representa una baja real de alrededor del 12% en los valores productivos, y el compromiso de ambas partes para revisar dichos valores de cara a la próxima temporada.
“Se llegó a un acuerdo transitorio y se logró generar un consenso, sin tocar los convenios”, explicó a LA CAPITAL el secretario general del SOMU Mar del Plata, Oscar Bravo y agregó que “hubo que ceder de las dos partes para lograr un acuerdo y no perjudicar a los trabajadores”.
El acuerdo con el SOMU se suma a los ya alcanzados con los sindicatos SICONARA y Capitanes, así como al congelamiento acordado previamente con los trabajadores de estiba del fresco y congelado.
El conflicto se originó cuando los empresarios del sector pidieron rediscutir el convenio colectivo de trabajo (CCT) de los marineros al advertir que, en las condiciones actuales, sacar un barco no es rentable. Esgrimieron que el precio internacional del langostino entero cayó un 2,8% a nivel interanual y las colas de la misma especie, un 5,6%.
Esto desembocó en un pedido formal para rebajar un 30% el ítem salarial por producción de los marineros, a lo que el SOMU (Sindicato de Obreros Marítimos Unidos) y el Simape (Sindicato Marítimo de Pescadores) se opusieron.
A raíz de este conflicto, en Puerto Madryn, Puerto Deseado y Mar del Plata hay 111 barcos congeladores amarrados, que no empezaron la temporada de langostino en aguas nacionales. Tan solo tres salieron a pescar, y dos de estas embarcaciones lo hicieron desde la terminal marítima local bajo el esquema “70/30”.
Por el conflicto, en la actualidad hay 25 buques congeladores amarrados en Mar del Plata con cerca de 600 de trabajadores sin actividad, según informó el SOMU.
La parálisis de la flota tangonera congeladora se tradujo en un marcado descenso en los desembarques de langostino en lo que va de 2025, de acuerdo al último reporte de la Subsecretaría de Pesca de la Nación.
Hasta el 22 de julio, las descargas de esta especie ascendieron a casi 62.000 toneladas en Argentina, de las cuales tan solo 2.600 fueron en el puerto de Mar del Plata. Rawson encabeza los desembarques, con poco más de 55.000 toneladas.
Los números muestran una fuerte baja respecto al mismo periodo del año pasado. Al cabo de los primeros siete meses del 2024, ya se habían descargado 125.500 toneladas de langostino en todo el país.