La Justicia investiga si el incendio de la histórica casilla de la loma de Colón fue intencional o si se trató de un accidente.

La fiscal Florencia Salas quedó a cargo de una causa iniciada este miércoles a la madrugada, luego de que tres dotaciones de bomberos de los cuarteles Centro y Puerto apagaran las llamas que arrasaron la vivienda ubicada sobre la calle Alvear.

En ese marco, la investigadora aguarda por los peritajes correspondientes para delinear la pesquisa. Hasta el momento, sólo se supo que el inmueble había sido declarado de interés patrimonial en el marco de la ordenanza 10.075, y que pertenecía a un privado que la había puesto en venta a través de la inmobiliaria Robles.

Por otra parte, los vecinos consultados por LA CAPITAL en el lugar manifestaron que en los últimos tiempos habían notado allí movimientos extraños y sospechaban que estaba usurpada. “La prendieron fuego a propósito para vender el terreno. Se cae de maduro”, dijo un hombre que paseaba un perro por la zona. Otra mujer, en tanto, señaló: “Es obvio que quieren hacer otro edificio”.

La vivienda de la zona de Alvear y Colón se prendió fuego este martes a la medianoche y si bien no hubo víctimas fatales ni heridos, los daños materiales fueron totales.

El incendio en la casa, de relevancia patrimonial en la ciudad, se desató por motivos aún desconocidos y tres dotaciones de bomberos de los cuarteles Centro y Puerto se presentaron rápidamente en el lugar, así como personal de Defensa Civil. En ese marco, detectaron que el foco ígneo en la propiedad que ocupaba un terreno con una superficie de 20 metros cuadrados y apagaron las llamas.

La historia de la propiedad incendiada se remonta a 1903, cuando fue construida a pedido de Benjamín Anchorena, quien luego se la vendió a la familia Blaquier. La acompañaban a comienzos del siglo XX otros cinco chalets de madera en la manzana que completan las calles Bolívar, Güemes y Alvear, sobre la cual se emplazaba esta última en pie.