En un nuevo capítulo de su diatriba contra los cuidacoches, el intendente Guillermo Montenegro informó este lunes que fue detenido un “trapito extorsionador” luego de que le diera un puntazo a un agente municipal.

“La Patrulla Municipal agarró otro trapito extorsionador. En el momento del cacheo, el violento sacó un arma y le dio un puntazo en la mano a nuestro agente”, relató el jefe comunal a través de sus redes.

Montenegro aseguró que el cuidacoches “intentó huir y fue en vano. Lo atraparon porque a eso se dedican”. Por eso remarcó la necesidad de “buscarlos, encontrarlos y agarrarlos”, y de poner “orden en el lugar que es de todos, en el espacio público”.

La Patrulla Municipal agarró otro trapito extorsionador. En el momento del cacheo, el violento sacó un arma y le dio un puntazo en la mano a Nuestro Agente.

Intentó huir y fue en vano. Lo atraparon porque a eso se dedican. A buscarlos, encontrarlos y agarrarlos. A poner orden en… pic.twitter.com/3sjBeN2870

— Guillermo Montenegro (@gmontenegro_ok) February 10, 2025

Según precisaron fuentes de la comuna, el cacheo se realizó en Sarmiento entre Garay y Rawson, tras la intervención del Grupo de Control Urbano de la Patrulla Municipal. En el operativo, el cuidacoches extrajo un objeto cortopunzante y le provocó un pequeño corte en la mano a un agente.

Acto seguido, el hombre emprendió una fuga a pie y, finalmente, fue interceptado y reducido en Alsina y Garay. Allí, se acercó un móvil policial para realizar el correspondiente traslado a la comisaría novena.

“Todos los que defienden a los trapitos deberían preguntarse: ¿Para qué tenía el arma? ¿Cuánto daño causó? ¿Amenazaba a las personas que lo único que querían era estacionar su coche?¿Pinchaba gomas a los que no le pagaban la tarifa?”, continuó el intendente.

Y, en un tono más confrontativo, remarcó: “Quiero saber en qué piensan cuando se paran enfrente de la gente para defender al delincuente. ¿Qué les atrofia el cerebro como para defender los derechos del delincuente antes que el auto y la integridad de la persona que lo maneja?”.

A modo de ejemplo, Montenegro recordó que su padre era submarinista y su madre, costurera. “Me enorgullecen sus profesiones, pero en mi casa no sobraba el mango. Por eso tengo la cultura del ahorro tan establecida. Cuando yo era chico, en la pobreza había dignidad”, planteó.

El jefe comunal contó que tenía compañeros de la escuela que vivían con “piso de tierra, que se regaba para que no levante polvo”. Y contrapuso que ahora “amenazan a las maestras que desaprueban a un alumno”.

“Disfrazan de pobreza a la violencia y la estrechez de mente”, sentenció.