Un matrimonio compuesto por una mujer de 62 años y su esposo de 66, y el hijo de ambos de 39, fueron detenidos por controlar un marginal “point” de drogas en el barrio Bosque Grande donde el año pasado se cometió un brutal asesinato por el cual fue detenido otro “dealer”.

La labor investigativa de la Dependencia de Drogas Ilícitas de la policía bonaerense permitió así desarticular el funcionamiento de este clan al que se le secuestró una importante cantidad de cocaína. Lo significativo de la forma de operar de estos narcomenudistas radica en que acopiaban la droga en su propia casa particular ubicada en un sector bastante alejado de la ciudad.

Según los datos a los que pudo tener acceso LA CAPITAL, fue fundamental para descubrir esta metodología el uso de una cámara lectora de patentes de la Municipalidad que está instalada justo en frente de la vivienda de esta familia.

La investigación impulsada por la fiscalía de Estupefacientes a cargo de Daniela Ledesma, Leandro Favaro y Pablo Cistoldi comenzó a fines de noviembre luego del asesinato de Kevin Mendoza un hombre de 28 años al que acribillaron en Tripulantes del Fournier y Rufino Inda. Días después fue detenido Roberto Becerra, quien permanece en esa condición acusado del asesinato.

Sin embargo, la policía empezó a trabajar para detener la venta de drogas en ese sector de la ciudad, un predio de varias cuadras repleto de casillas usurpadas, muchas de ellas por personas de bajos recursos trabajadoras y otras por delincuentes. Al introducir personal en la zona, grabaciones en video con el uso de drones y tareas de vigilancia permanente, se detectó el funcionamiento de un “point” en calles Soler entre Rufino Inda y Guerrico y otro a unos metros de allí.

Al mismo tiempo se estableció que dos automóviles, un Citroën y un Renault 18, se usaban para abastecer los “points” de cocaína y marihuana. En esos vehículos se movían padre e hijo desde una casa en Mario Bravo al 5300. Cuando los policías pidieron un informe sobre por qué zona de la ciudad transitaban esos vehículos, el COM municipal les avisó que una cámara LPR (lectora de patentes) alertaba con frecuencia permanente que pasaban por ese sector de la avenida.

Así fue cómo se montó vigilancia allí y se supo que el “dealer” tenía a sus padres viviendo en esa casa de donde salía toda la droga que luego vendía.

Así vendían drogas en un point allanado en Bosque Grande 🔴 pic.twitter.com/OsfwiXAgAM

— La Capital Mar del Plata (@lacapitalmdq) June 26, 2025

Con esta información se solicitaron tres allanamientos que la Justicia de Garantías autorizó para últimas recientes con el objetivo puesto en la casa de la avenida Mario Bravo y las dos casillas de Bosque Grande.

Durante el operativo se logró el secuestro de una importante cantidad de cocaína de máxima pureza tanto en forma compacta como así también en envoltorios ya fraccionada lista para su venta. Eso junto a una cantidad menor de marihuana; armas de fuego como una carabina calibre .22, un revólver calibre .22, otro calibre 32; dinero en efectivo, balanzas de precisión y celulares fueron halladas en la casa de Mario Bravo.

Para evitar que se continúen usando los “points” como boca de expendio de drogas, se demolieron a través de personal municipal.

Padre e hijo fueron alojados en la Unidad Penal 44, mientras que la mujer fue derivada al Destacamento Femenino junto con una joven de 23 años aprehendida en unos de los “points”. Todos quedaron imputados del delito de Infracción a la Ley 23.737 y tenencia de arma de fuego.