Este sábado, a horas de las votación, en el Astillero Naval Contessi de Mar del Plata se llevó a cabo la botadura del “Sotavento”, un moderno buque pesquero perteneciente a la firma armadora La Escalerona S.A., del Grupo San Isidro. La embarcación se incorporará a la flota con asiento en Rawson, provincia del Chubut.

El acto tuvo lugar por la mañana en las instalaciones del astillero y, en plena veda electoral, convocó a gran cantidad de empresarios, trabajadores, autoridades y referentes del sector pesquero, que presenciaron la ceremonia, escucharon los discursos y aplaudieron el momento culminante en que la embarcación se adentró en el mar.

Asistieron autoridades de la Prefectura Naval, la Armada Argentina, el INIDEP, el Ministerio de Trabajo, la Federación de la Industria Naval, la UCIP, la Asociación Bonaerense de la Industria Naval, la Cámara de la Industria Naval, la Universidad Tecnológica Nacional, Siconara, SAON y concejales de distintas fuerzas políticas, entre otros.

“Es la botadura 155, la quinta del año 2025 y la sexta que celebramos en 11 meses. Estamos a punto de culminar una etapa frenética de trabajo y nos adentramos en otra con mayor incertidumbre, pero no bajaremos los brazos y confiamos en que durante 2026 podremos realizar dos o quizás tres botaduras de barcos nuevos”, dijo el presidente del astillero, Domingo Contessi.

El representante de la empresa volvió a marcar el proceso de “desaceleración” en el proceso de renovación de la flota pesquera, pero enseguida aclaró: “Como estamos en veda, no vamos a ahondar en esos conceptos”.

Durante la ceremonia, Contessi realizó un reconocimiento especial a los trabajadores que componen el equipo de más de cien personas del astillero. Entre ellos, se mencionó y aplaudió al departamento técnico, con profesionales formados en la UTN de Mar del Plata; los capataces, soldadores, caldereros, cañistas, carpinteros, pañoleros, técnicos y administrativos, entre otras especialidades dentro de la industria naval.

Domingo Contessi agregó: “Hasta hace un tiempo teníamos hasta ocho barcos en construcción simultánea, con el sonido de las herramientas sonando como una gran orquesta. Y queremos seguir tocando. Queremos hacerlo porque el país lo necesita. No todo es servicio, no todo es finanzas, no todo es virtual. Esto es orgullosamente industria naval argentina, competitiva y de calidad”.

El “Sotavento” tiene 20,95 metros de eslora, 7,50 metros de manga moldeada y 3,30 metros de puntal. Puede alcanzar una velocidad máxima de 10 nudos. Su diseño combina capacidad de maniobra, amplitud de bodega y habitabilidad, dándole prioridad a la eficiencia y la comodidad de la tripulación en las operaciones de pesca de langostino.

Asimismo se destaca el confort de sus alojamientos y el uso de materiales ignífugos, un diferencial en materia de seguridad y habitabilidad.

Desde el astillero confirmaron que se trata de la botadura número 155 en su historial y la última de una serie de cinco barcos gemelos construidos para armadores de Rawson.

Para completar la ceremonia, los armadores, la madrina de la embarcación (Virginia Ferrer) y las autoridades presentes se unieron en el momento cúlmine, cuando tras la cuenta regresiva desde el escenario se estrelló la tradicional botella de champagne contra el casco del “Sotavento”, antes de que este se haga por primera vez a la mar junto al deseo de “buena pesca” en cada una de sus mareas.