Brasil le ganó a Perú por 3 a 1 en la final de la Copa América de fútbol y se quedó con su noveno título continental de la historia, en partido jugado en el estadio Maracaná de Río de Janeiro que se definió con los goles de Everton, Gabriel Jesús y Richarlison, de tiro penal, para el vencedor; había igualado transitoriamente Paolo Guerrero, también desde los doce pasos.

Brasil venía de eliminar a Argentina en semifinales, con un polémico partido que terminó 2-0 para el dueño de casa.

Brasil se afianza así en el tercer lugar del ránking de ganadores del torneo continental, aunque todavía lejos de Uruguay, que lidera con 15 títulos, y Argentina, que lo sigue con 14 coronas.

La victoria le permitió a la Canarinha ganar su noveno trofeo de Copa América, una especie de sanación interior por el fracaso en el Mundial 2014, del que fue anfitriona y favorita, y que luego se repitió en el de Rusia 2018.

La fiesta final, sin embargo, se vio empañada por las explosivas declaraciones del astro argentino Lionel Messi, expulsado ante Chile en el partido por el tercer puesto, el sábado en Sao Paulo, acusando a la Conmebol de corrupta y de favorecer a Brasil para que fuera el campeón.