El arrecifeño Agustín Canapino (Chevrolet), en conjunto con Martín Ponte y Federico Alonso, se consagró en una entretenida carrera especial de los “1000 Kilómetros” del Turismo Carretera, disputados en el mítico autódromo “Juan y Oscar Gálvez”, de Buenos Aires.

Canapino fue escoltado en pista por los trinomios de Julián Santero, Andrés Jakos y Mario Valle (Dodge), y Leonel Pernía, Juan Cruz Benvenuti y Emmanuel Pérez Bravo (Torino), en una competencia -válida por la novena fecha del campeonato- en la que fue vital el trabajo de los boxes para el intercambio de pilotos.

Sin embargo, el trinomio de Sandero fue recargado con 10 segundos por un toque a Nicolás Trosset y la posición de escolta la heredó el tandilense Pernía.

Al tercer escalón del podio ascendió, entonces, Facundo Ardusso, con un Torino que tuvo también al volante a Federico Pérez y Tomás Urretavizcaya.

El santafesino Ardusso, de esta manera, quedó a 19 unidades del líder del campeonato, el bonaerense Jonatan Castellano, quien terminó undécimo con su Dodge junto a Joel Gasmman y Gustavo Micheloud, a dos vueltas del ganador.

El marplatense Christian Ledesma (Chevrolet), en tanto, había logrado sobreponerse a una prematura pinchadura en el neumático trasero derecho y llegó a girar en el Top-10 (octavo), aunque una falla lo dejó fuera de carrera. Todavía quedaban 41 vueltas.

El mejor Ford fue el de Luciano Ventricelli, quien compartió butaca con Ernesto “Tito” Bessone -además comentó la carrera para la TV Pública, como es habitual- y Claudio Bisceglia, en el quinto puesto.

Canapino pudo superar algunos problemas que presentó su Chevrolet durante la extensa y extenuante competencia, pactada a 178 vueltas, y a falta de diez giros tomó la posición de privilegio para obtener su octavo triunfo en TC, el primero desde el que consiguió en mayo de 2017, en La Pedrera.

El “Titán” se sobrepuso a esas adversidades, fue paciente y entendió que tenía que llegar al final con opciones, donde ayudado por el ingreso de un Auto de Seguridad, tomó el envión para dar el zarpazo y quedarse con la victoria.