Dos jóvenes acusados de haber sido parte de un banda que cometió violentos asaltos a fines de noviembre fueron detenidos tras un operativo en el que la policía secuestró armas, ropa y teléfonos celulares. Otros dos sospechosos, ambos menores, continúan prófugos.

La causa es investigada por el fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil Walter Martínez Soto, e incluye cuatro episodios calificados como robo agravado por el uso de arma de fuego, cometido en poblado y en banda, lesiones graves y atentado a la autoridad.

El primer ataque ocurrió cerca de las 2 de la madrugada del 29 de noviembre en Rosales y Etchegaray, cuando un hombre de 57 años fue interceptado dentro de su Toyota Etios por cuatro asaltantes armados que lo golpearon, le robaron el vehículo y sus pertenencias y realizaron un disparo al huir. Horas después, el auto apareció incendiado en Juana de Azurduy, entre Vértiz y Azopardo.

Poco más tarde, a las 7.20, una mujer de 43 años fue sorprendida al salir de su casa en Daireaux al 1800. Cuando intentó subir a su Fiat Cronos, un Toyota Etios rojo le bloqueó el paso. Del interior descendieron tres ladrones armados, mientras un cuarto permanecía al volante. Con gran violencia la obligaron a entregar su vehículo y escaparon en ambos autos.

A las 8.55, el Fiat Cronos robado fue detectado por cámaras del COM y móviles del Comando de Patrullas. Tras una persecución por distintas calles, al intentar cercarlo en Antártida Argentina y Mario Bravo, el conductor realizó una maniobra evasiva marcha atrás, cruzó de carril, subió a la vereda y atropelló a dos hombres de 30 y 57 años, quienes sufrieron lesiones graves. Aun así logró huir.

Pocos minutos después, alrededor de las 9.20, el vehículo fue abandonado en Cerreti y Lebensohn. En su interior, Policía Científica halló documentación del Toyota Etios sustraído en el primer hecho, además de una vaina servida calibre 9 milímetros.

Cayeron dos jóvenes por una seguidilla de robos armados 🔴

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— Diario La Capital Mar del Plata (@lacapitalmdq) December 6, 2025

Identificados por cámaras 

El 1 de diciembre, y tras el análisis de cámaras, comparativas y otras tareas de inteligencia, la DDI logró identificar a los cuatro presuntos responsables: dos jóvenes de 18 años y dos menores de 16 y 15. Con esa información, la Justicia de Garantías ordenó allanamientos y detenciones para el 5 de diciembre.

Los operativos se realizaron en cuatro domicilios ubicados en Azopardo al 11.300 (dos viviendas), Tripulantes del Fournier al 11.200 y Juan de Dios Filiberto al 500.

En uno de los inmuebles se detuvo a uno de los mayores investigados y se secuestró un teléfono celular y una campera utilizada en el hecho. En otro de los domicilios no se encontró al menor buscado —quien quedó prófugo— pero sí se secuestró ropa vinculada a los robos.

En el tercer objetivo se concretó la detención del segundo joven de 18 años y se incautaron un teléfono celular y zapatillas que habría usado durante el raid delictivo.

El cuarto allanamiento permitió secuestrar dos armas de fuego: una pistola Bersa Thunder Pro 9 mm con municiones, cargadores y cajas de cartuchos; y una pistola Bersa calibre .22, además de vainas servidas y otro teléfono celular.

Los detenidos fueron trasladados a la Unidad Penal 44 de Batán, mientras que la DDI continúa con las tareas para dar con los dos menores identificados, quienes permanecen prófugos.