El hombre de 41 años que en la madrugada del último domingo mató de un tiro a su hermano mayor, Ismael Almonacid (53), se entregó este miércoles en Tribunales y quedó detenido.

Cercado por la policía, que había realizado diversos allanamientos en domicilios e inspecciones en lugares a los que solía concurrir, Luis Almonacid se presentó ante la Justicia y quedó a disposición del fiscal Leandro Arévalo, quien está a cargo de la causa. Personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local, en conjunto con los uniformados de la comisaría quinta -con jurisdicción en el lugar donde ocurrió el crimen- había intervenido en las averiguaciones del caso.

Luego de su entrega, Almonacid fue trasladado a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán, donde seguirá alojado mientras continúa el proceso judicial. Está imputado por el delito de “homicidio”.

El hecho se produjo en horas de la madrugada del domingo pasado, cuando alrededor de las 2 los hermanos se hallaban en el patio que compartían las viviendas de ambos, en el barrio Las Canteras, junto a sus hijos y el resto de sus familiares. Si bien se desconocen los pormenores de la pelea, los testigos contaron a la Justicia que las dos personas habitualmente se enfrentaban por distintas cuestiones pero en ese momento celebraban un cumpleaños.
La fiesta se desarrollaba normalmente en el inmueble de Salvador Tohel al 6900, a metros de la Escuela de Policía Juan Vucetich, cuando se produjo una discusión y el menor de los hermanos le disparó al mayor con un arma de fuego que sería una escopeta.

El balazo hirió gravemente en una pierna a la víctima, identificada como Ismael Almonacid (53), quien comenzó a desangrarse a la vista de todos los presentes. El agresor, en tanto, escapó del lugar.

Los testigos intentaron salvarle la vida al hombre realizándole un “torniquete”, y llamaron a una ambulancia que se hizo presente en la vivienda en cuestión de minutos. Poco después, llevaron a cabo el traslado urgente del herido al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde los médicos lo intervinieron rápidamente.

A pesar de los esfuerzos de los especialistas, la víctima -que tenía antecedentes penales- falleció en el nosocomio.

Por su parte, los uniformados de la comisaría quinta -con jurisdicción en el lugar del hecho- notificaron de lo ocurrido al fiscal Leandro Arévalo, quien se hizo presente en la escena del crimen. Bajo sus órdenes trabajaron también los uniformados de la Policía Científica, que efectuaron los primeros peritajes y tomaron las primeras declaraciones: así se supo que el autor del hecho había sido el hermano menor de la víctima.

Por ese motivo, desde un principio los investigadores sospechaban que Almonacid podía entregarse, lo que finalmente se produjo en las últimas horas.