CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 28 de abril de 2018

Cierra Nuncio De Rosa, un almacén naval con más de 40 años de historia

Se los comunicó el dueño a los cerca de 40 empleados. Ya empezaron a llegar los telegramas de despido. Hay controversias por los sueldos y las indemnizaciones.

Trabajadores de Nuncio De Rosa jugando a las cartas mientras hacían "guardia" en su lugar de trabajo.

El almacén naval Nuncio De Rosa, una tradicional empresa del Puerto, cierra después de más de cuatro décadas y dejará a sus casi 40 empleados en la calle. La decisión fue comunicada hace una semana por los dueños de la empresa, herederos del fundador, y se materializará el lunes. Las persianas de la calle Magallanes al 3100 ya estuvieron bajas en los últimos días. Los trabajadores saben que tarde o temprano llegarán los telegramas de despido, pero igualmente asisten a cumplir su horario de trabajo: tomaron la decisión de permanecer en las instalaciones hasta que les paguen los sueldos de abril y se determinen las indemnizaciones.

También para custodiar la mercadería. Es que el jueves se vivieron momentos de tensión cuando un camión de una reconocida empresa pasó a buscar artes de pesca. “No lo permitimos. Llamamos a los sindicatos y tomamos la empresa”, contó uno de los empleados a LA CAPITAL.

“Los compañeros están haciendo guardia para cuidar los bienes que hay ahí adentro, porque los tienen que vender para juntar dinero para el pago de las indemnizaciones”, explicó Darío Zunda, secretario gremial del Sindicato de Empleados de Comercio (SEC), que representa a la mayoría de los trabajadores (el resto responde a Camioneros).

También hubo controversias por el primer telegrama de despido que llegó, que mencionaba el artículo 247° de la Ley de Contrato de Trabajo, lo que daba lugar a una indemnización al 50%. “Pero eso requiere que la empresa presente los balances, muestre los números, pida un preventivo de crisis, lo que no hizo”, aclaró Zunda. “Así que le manifestamos al dueño nuestro absoluto desagrado, porque con nosotros se comprometió al pago de las indemnizaciones por el artículo 245°, que implica el 100% de las indemnizaciones”, agregó.

Mauro, uno de los empleados, cuenta que venían trabajando con normalidad hasta que “hace dos semanas” debía hacerse la entrega de un pedido importante y no se habían comprado los insumos de verdulería. “Entonces nos enteramos que el jefe de compras les había dicho a los proveedores que no les iba a comprar más porque la empresa iba a dejar de tener actividad”, comentó.

A eso se sumó el rechazo de pedidos de buques extranjeros y de otros locales, por lo que los trabajadores decidieron hablar con el dueño para aclarar lo que sucedía. “Nos dijo que la empresa estaba mal y que estaba buscando inversores para que continuara. Nos pidió una semana de plazo porque ya tenía dos negociaciones encaminadas”, mencionó.

Pero luego las cosas empeoraron. “El sábado siguiente el dueño apareció, dijo que esos inversores no estaban, que la empresa tenía una deuda importante con los proveedores y que en mayo tenía que cerrar las puertas”.

NUNCIO 18

El avituallamiento de buques de pesca fue abierto en Mar del Plata 1976 por Nuncio de Rosa, un pescador napolitano que ya tenía un taller de construcción y reparación de redes. “Es el almacén naval más importante de Mar del Plata”, lo definió el secretario gremial del SEC. “El fundador falleció hace cinco años. Fue un empresario modelo. Los herederos no han hecho bien las cosas y no han podido sacar la empresa adelante”, apuntó.

El almacén cuenta con una sucursal en Puerto Madryn, en el que se desempeñan diez trabajadores y también cerrará.

Sobre los acontecimientos que llevaron a la debacle de la firma hay distintas visiones. “Se habla del estado del puerto y el país en general, pero nosotros seguíamos teniendo barcos para aprovisionar y había trabajo. Lo que sucedió fue que el dueño derivó sus inversiones a otro lado y estamos pagando nosotros las consecuencias”, comentó un trabajador.

El gremio es el que alude a la crítica situación del puerto y a la falta de políticas para sacarlo adelante. “Se están yendo los barcos. Esa es la realidad. Hay empresas del puerto con un grado de conflictividad muy grande porque no hay materia prima. Al no haber merluza, que es la producción más importante en términos de empleo, la gente de otros gremios está parada. Es una situación que se va agravando día a día, una muestra más de la falta de políticas públicas para poner en valor el puerto”, afirmó Zunda.



Lo más visto hoy