Referentes de los Centros Barriales de Emergencia (CBE), espacios que articulan esfuerzos en decenas de barrios vulnerables para mitigar el hambre y el impacto económico de la pandemia, se manifestaron este viernes en Luro e Hipólito Yrigoyen para denunciar y advertir la “interrupción” del aporte alimentario que realizaba el gobierno municipal.

Desde que comenzó la pandemia de coronavirus, los CBE afianzaron una red de contención social que asiste a miles de familias de Mar del Plata y Batán con más de 45.000 viandas por semana elaborados por cerca de 3000 personas voluntarias, en su mayoría mujeres, distribuidas en más de 350 centros comunitarios y comedores.

“Luego de una serie de instancias de diálogo y en la reunión de Mesa Social del jueves 7, el gobierno municipal de Guillermo Montenegro comunicó que este viernes no habrá entrega de alimentos frescos y que peligra la continuidad del mes de enero“, expresaron desde los CBE.

Osvaldo Macedo, referente de esta red de contención social, explicó que “con argumentos diversos” y “cuestiones vinculadas a licitaciones” pero “sobre todo falta de previsibilidad”, el gobierno local “interrumpió el aporte alimentario y la entrega de insumos de higiene”.

En tanto, Facundo Barrionuevo, otro de los referentes, señaló que en los últimos meses del 2020 contaban por semana con cerca de 20 toneladas de alimentos frescos (verduras y carnes), lo que constituye un aporte nutritivo fundamental a la hora del sostenimiento de las más de 350 ollas comunitarias en Mar del Plata y Batán.

“Frente a este recorte tenemos una gran preocupación sobre lo que pueda pasar en las semanas siguientes de enero y febrero. Hoy todo lo están sosteniendo los compañeros con la ayuda de clubes, iglesias, con los alimentos que reciben de Provincia, pero es muy pequeño en relación al aporte proteico que habíamos logrado de parte del municipio”, indicó.

En algunos comedores y merenderos el “corte” en el envío de alimentos se produjo hace dos semanas, mientras que en otros ocurrió en los últimos días. Los referentes sociales destacan “plena voluntad de diálogo” para restituir las partidas, pero admiten que hay “una gran preocupación” por esta situación y lo que pueda a ocurrir a corto y mediano plazo.

“En estos comedores y merenderos, sostenidos por una amplia variedad de instituciones y organizaciones sociales, se elaboraron más de 45.000 viandas semanales durante todo el año y se entregaban a los sectores más humildes”, expresaron, molestos con el anuncio del gobierno municipal.

Seguido, tildaron de “inesperada” a esta decisión y advirtieron que la misma los llevó a ponerse “en alerta y preocupación”, nada menos que cuando General Pueyrredon atraviesa “una subida estrepitosa de casos de COVID-19”.

Los referentes de los Comités Barriales de Emergencia decidieron dar a conocer esta “situación crítica” a través de una conferencia realizada esta mañana en las puertas de la Municipalidad, oportunidad en la que además anunciaron que ya se convocó, para la semana que viene, a un plenario de delegadas y delegados en el que se evaluarán “los pasos a seguir en el reclamo que hacemos al gobierno municipal de Guillermo Montenegro de reestablecer el sistema de reparto de alimentos frescos y elementos de limpieza”.

“Reafirmamos la necesidad de sostener y fortalecer la herramienta de los Comités Barriales, que fueron con gran creatividad y trabajo, garantes de un mínimo de dignidad y seguridad alimentaria y sanitaria en toda la pandemia Covid-19 para Mar del Plata y Batán”, agregaron.