Arte y Espectáculos

Como pareja en la ficción, Lavié y Artaza enfrentan el desafío de “La jaula de las locas”

Saben que es una de las comedias musicales más divertidas que sigue en cartel en las principales capitales teatrales del mundo.

“No nos queremos pasar de la línea, podríamos hacer más cosas que pueden salirse del libreto y ser más graciosas pero no nos queremos apartar del guión, que de por sí es muy bueno. Aunque a veces con el Negro (Lavié) nos da ganas de meter otras cosas”, confía Nito Artaza, actor y productor de “La jaula de las locas, el musical”, una superproducción teatral que debutará esta noche.

El exitoso musical estrenará a las 21.30 en el escenario del Teatro Mar del Plata (Luro 2335), con la presencia de Raúl Lavié, del mismo Nito y de Cecilia Milone como figuras centrales. Además, Cecilia es la directora de la comedia. A ellos se sumará un elenco de bailarines y de dos incorporaciones marplatenses: la periodista Mariela López Brown y el actor Bruno Bértoli.

“Cuando es un éxito de tantos años y probado, no cambien muchachos…”, comenta Lavié sobre los dichos de Nito, que no deja de querer incorporar chistes sobre la actualidad a una comedia musical que desde los años ’70 se viene haciendo en las principales capitales teatrales del mundo. De hecho, en la actualidad está en cartel en Barcelona, Madrid y México.

Se trata de una historia a favor de la inclusión que también llegó al cine: George y Albin (Artaza y Lavié) forman una pareja gay ya madura, que está a cargo de un local nocturno llamado “La jaula de las locas”. Ambos reciben la noticia de que el hijo de George va a contraer matrimonio con una mujer vinculada a una familia tradicional, conservadora y homofóbica. La pieza se estrenó en 1973 y tiene dramaturgia de Jean Poiret.

“Me encanta la comedia y se me ocurrió porque tiene mucho de show, es una de las comedias más divertidas -sigue Nito-. Se nos ocurrió que era para el verano y para debutar en Mar del Plata, porque siempre debutan en Buenos Aires. Cecilia ama el musical y dijimos de hacerla en Mar del Plata porque hay un público para la comedia musical”.

Es Lavié y su esposa Laura quienes abren su casa ubicada en un coqueto barrio marplatense para que se produzca la charla con LA CAPITAL. Entre tazas de té, budín y un ventanal enorme que invita a perderse en el verde del jardín, Lavié recuerda qué fue lo que le gustó de este personaje tan explosivo y colorido.

“Es un personaje muy rico y a mí me gusta afrontar este tipo de desafíos, en mi larga carrera teatral y sobre todo en mi carrera musical he encarado personajes dispares, Sorba el griego, El hombre de la mancha, Annie, Hello Doly, Victor Victoria. Incluso hice otro espectáculo que se llamó Los muchachos de la banda, que duró poco porque se hizo en tiempos de la dictadura militar y de ese tema entonces no se hablaba, era muy interesante porque los personajes gay eran interpretados por heterosexuales”.

Y vaya que enfrenta el gran Lavié este nuevo desafío. “Con Raúl se da la conjunción de que es un gran actor y que tiene ese vozarrón para cantar, tiene todo, es completo. El no lo va a decir, pero es el actor que más musicales protagonizó en Argentina, el Negro pisa el escenario y sabe para donde ir”, elogia Nito a su compañero y da cuenta del respeto y de la chispa que se produce entre ellos.

“Esta comedia necesita por lo menos tres meses de ensayos -arremete Raúl-, es muy complicada por los cambios de escenografía, es una comedia brillante con música, con cambios de escenografía, con cambios de vestuario, con música, nosotros no estamos acostumbrados a actuar con vestidos ni con tacos, no es fácil”. Para sostener la complejidad de ese rol, la producción dispuso de dos vestidoras y de una maquilladora exclusivas para él.

“No acostumbro a trabajar de taquito”

Lavié recuerda que desde que recibió el llamado que lo convocó para ser parte de este nuevo espectáculo, no deja de pensar en el guión. Revela así su costado hiper responsable y comprometido. “Cuando recibo el libro empiezo a desglosarlo, incluso me permití algunos cortes y estaba todo el día metido, desde que me levantaba hasta que me acostaba, en el libro, con las canciones en la cabeza para ir de a poco. Todo esto hace que uno no trabaje de taquito. Yo no acostumbro a trabajar de taquito. Las cosas las quiero firmes conmigo”, argumenta.

“No es ‘moco de pavo'”, sigue el cantante. “Hay que tener mucho entrenamiento” para realizar una comedia que supone contar “tres historias adentro de una más, el musical”.

Además, las canciones son un detalle que Nito no pasa por alto. “Es una comedia que tiene las mejores canciones de Broadway, ‘Soy como soy'”, que interpreta Raúl es impresionante, se me pone la piel de gallina cada vez que la interpreta”. Y ríe con chispa porque dice que “bien digo de gallina”, en alusión a su pasión por River Plate.

“Yo tengo que cantar al lado de un monstruo, Cecilia me puso a cantar desde hace un tiempo, porque si no cómo lo sigo a Raúl. Entreno mucho”, admite Nito, quien no deja de chequear cómo va la venta de entradas para el estreno de esta noche.

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