El ex presidente Eduardo Duhalde aseguró que con la desaparición de Santiago Maldonado “tal vez al Gobierno le paso lo mismo” que a él con los crímenes de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, cometidos el 26 de junio de 2002 por la Policía Bonaerense durante una represión en el Puente Pueyrredón.

“Tal vez les pudo haber pasado como nos pasó a (Felipe) Solá y a mí con el tema de Kosteki y Santillán, que se le va la mano a un tipo. Pero puede haber pasado, no puedo hablar de pálpitos”, advirtió.

En una entrevista publicada hoy por el diario Perfil, Duhalde no quiso criticar directamente al presidente Mauricio Macri por el mes de silencio sobre el caso, y aseguró que el ex presidente Néstor Kirchner también “rajaba para otro lado”.

“Cuando era jefe de Gobierno hizo lo mismo con el tema del Indoamericano, no dijo nada. Néstor era igual, rajaba para otro lado. Son improntas personales. No quiero hablar de Macri como un tipo especulativo, solamente tiene una forma distinta. Le puede jugar un poco en contra pero no creo que sea definitorio en términos electorales”, afirmó.

A nivel político, Duhalde opinó que “es bastante lógico lo que ocurrió en el país” con el resultado de las PASO y aseguró que “hoy el peronismo no es alternativa de nada, por eso insisto en que hay que apoyar al Gobierno con todo“.

“El que dice que hay alternativa es porque no entiende de política“, sostuvo y señaló que hay que ver qué pasa hacia el 2019 en el PJ ante la posibilidad de que aparezca un candidato con posibilidades.

Recordó el caso de Carlos Menem en 1989 (“nadie daba dos mangos por él”, dijo), y reveló que se reunió con el ex presidente riojano “hace dos o tres años, cuando el Papa planteó que teníamos que olvidarnos de las peleas” y decidió ir a ver a “tres o cuatro que tenía atravesados”.

Menem “es un encantador de serpientes” y “tiene una enfermedad que es el poder”, afirmó.

Según dijo, “la borrachera del poder es tremenda, Menem tiene ese gran problema. No era un tipo con una gran adicción al dinero, yo estuve cerca de él y nunca vi eso. Que dejaba hacer, sí”.

Tras señalar que él “siempre” sufrió el poder (“Podía quedarme cinco años y me fui”) Duhalde agregó: “Yo lo veo al presidente actual y digo: ‘Pobre tipo, está envejeciendo‘”.