Un hombre fue condenado a nueve años de prisión por haber intentado matar a golpes a otro durante una brutal pelea ocurrida al finalizar una fiesta de 15 en el barrio La Herradura.

El Tribunal Oral en lo Criminal N.º 1 halló penalmente responsable a Diego Paredes por el delito de homicidio en grado de tentativa, mientras que los demás imputados, Yesica Aguirre y Daniel Correa, resultaron absueltos tras el retiro de la acusación fiscal.

El hecho ocurrió en la madrugada del 21 de noviembre de 2021, en una casa donde se celebraba el cumpleaños de 15 la sobrina de Andrés Vega. La fiesta ya había finalizado cuando Correa y Aguirre, que no estaban invitados, se acercaron al portón de entrada a pedir alcohol. Allí comenzó una discusión con los familiares de la cumpleañera que escaló en violencia.

#MardelPlata Condenaron a un hombre por querer asesinar a otro tras una fiesta de 15 🔴

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— La Capital Mar del Plata (@lacapitalmdq) May 29, 2025

Según determinó el tribunal compuesto por Paula Soulé, Pablo Viñas y Facundo Gómez Uerso, Paredes, pareja de Aguirre y vecino del lugar, golpeó con un tirante de madera de aproximadamente un metro de largo en la cabeza a Andrés Vega, tío de la adolescente, mientras este se encontraba forcejeando con Correa. El ataque fue sorpresivo y generó consecuencias devastadoras: Vega perdió el conocimiento y sufrió fractura de cráneo, hematomas internos, pérdida parcial del cráneo, sordera casi total de un oído y problemas visuales, entre otras secuelas permanentes.

Durante el juicio, los jueces valoraron los testimonios de testigos presenciales y el video registrado en el lugar. Se comprobó que Paredes no tenía autorización para estar en la fiesta, a la que sí había asistido su pareja con su hijo. A pesar de ello, ingresó dos veces sin permiso y fue identificado por múltiples testigos como el autor del golpe. En cambio, no se logró acreditar que Correa ni Aguirre hayan participado de los golpes una vez que Vega ya estaba en el suelo, lo que motivó al fiscal a retirar la acusación contra ellos.

En su fallo, el tribunal descartó la existencia de alevosía pero dio por probado que el golpe fue intencional y con conciencia del riesgo de muerte, lo que encuadra en el tipo penal de homicidio en grado de tentativa. Además, tuvo en cuenta como agravantes las graves secuelas sufridas por la víctima y los antecedentes penales del acusado.