La decisión de Vidal provocaría la pérdida del trabajo a 7.000 personas que ejercen la docencia sin un título oficial que los habilite.
LA PLATA (Corresponsalía).- Con un comunicado en la web de la cartera educativa bonaerense, el gobierno provincial salió a justificar la medida mediante la cual se ampara en los incisos C de los artículos 109 y 110 del Estatuto Docente, para no renovar las horas cátedras de quienes ejercen la docencia sin un título habilitante.
El texto indica que “La Dirección General de Cultura y Educación, en el marco de las mesas de cogestión establecidas en la ley 10.579 que integran las entidades gremiales y la Subsecretaría de Educación, viene trabajando en la formal aplicación del Estatuto del Docente en sus artículos 109 y 110” algo que fue desmentido por los gremios, desde los cuales se señala que la medida fue tomada de manera unilateral por el gobierno vidalista.
En la cartera conducida por Gabriel Sánchez Zinny sostienen que la implementación del estatuto, promueve garantizar los derechos de todos los docentes y aspirantes a los cargos, y los derechos de los alumnos a recibir una educación de calidad en igualdad de condiciones, en todas las escuelas del territorio provincial.
El texto remarca que “en algunas ocasiones, dichas coberturas perduran en el tiempo, situación que impide el acceso a personal titulado, que ha quedado a la espera de vacantes sin cubrir”, por lo que resulta necesario “promover la terminalidad de los estudios de los alumnos de los Institutos Superiores de Formación Docente, para garantizar mayor cantidad de docentes titulados al frente de alumnos” y para “que los maestros recientemente promovidos de las carreras docentes, puedan ingresar al sistema educativo y ser designados en cargos provisionales, se vuelve necesario la aplicación del artículo 109 inc. C del Estatuto del Docente”
Por este motivo las Jefaturas Distritales realizarán un relevamiento del personal con desempeño docente que haya accedido al cargo sin título habilitante, que se reiterará en cada año escolar, con la certeza de incentivar la finalización de la carrera docente y la formación continua de los recursos humanos del sistema educativo. Detectado el personal que obtuvo el título habilitante, se le otorgará continuidad a los efectos de preservar la atención de los alumnos del ciclo escolar inmediato siguiente. Para quienes continúen en situación de estudiantes, los Inspectores de Enseñanza realizarán un relevamiento con un Plan de Metas, que registre la regularidad, seguimiento y finalización de los estudios superiores realizados y a realizar, en el ciclo lectivo siguiente del Nivel Superior. Dicha medida entrará en vigencia a partir del 28 de febrero de 2018.
Así las cosas, los docentes “sin título” no quedarán al margen de los concursos por los cargos, sino que perderán prioridad ante otros que hayan cursado o estén cursando la carrera pedagógica, lo que provocará demoras en la asunción de esas horas y perjudicará a los alumnos que en su mayoría son de escuelas rurales.
Los gremios pusieron el grito en el cielo al remarcar que es el gobierno que llamó a voluntarios a dar clases el que hoy elimina a los no titulados, y al asegurar que además será el mismo gobierno el que amparado en esta medida, eche a los docentes que deberá volver a contratar cuando esas horas queden vacantes nuevamente.