La defensa de Claudio “Pirulo” Altamiranda (20), uno de los imputados por el robo y asesinato de Gabriel Aramayo, pidió que fuera sobreseído de la causa en la que recientemente el fiscal solicitó su elevación a juicio.

El abogado que representa a “Pirulo”, Mauricio Varela, solicitó a la Justicia de Garantías el sobreseimiento del imputado por “partícipe necesario”, ya que asegura que su defendido no tuvo relación con el crimen de Aramayo y que, las “únicas” pruebas que posee el fiscal Leandro Arévalo son “testimonios poco confiables”.

A Altamirando se lo acusa de haber disparado para asegurar la huida de su primo,  Franco “Curly” Altamiranda (22) y Fabián “Peluchín” Urbistondo (35) -imputados como coautores del homicidio de Aramayo-, acusación a la que se llega por testimonios de vecinos.

El pedido de sobreseimiento presentado por Varela tendrá que resolverlo la Justicia de Garantías, que también debe aceptar o no el pedido de elevación a juicio del fiscal.

El crimen de Aramayo ocurrió el 9 de junio de 2020, cuando la víctima, que circulaba en su moto marca Honda XR 150 por la avenida Polonia, al llegar a Hernandarias, fue atacado por un grupo de personas, entre los que se encontrarían “Curly” y “Peluchín“ y cuatro menores de edad.

Los sospechosos lideraron un violento robo piraña: le arrojaron un palo a las ruedas de la moto para que perdiera el equilibrio y, una vez cayó al suelo lo atacaron y golpearon en la cabeza y el cuerpo para quitarle un bolso, las zapatillas y la moto.

“Pirulo” Altamiranda fue detenido tras una entradera.

Pirulo, detenido en una violenta entradera

“Pirulo” Altamiranda se encontraba en libertad por la causa del crimen de Gabriel Aramayo cuando, el domingo 28 de marzo, fue detenido en el barrio San Patricio, acusado de haber participado de una violenta entradera.

La causa, que quedó caratulada como “robo agravado por ser cometido en poblado y en banda y por el uso de arma de fuego no secuestrada”, la lleva el fiscal Mariano Moyano y tiene como único detenido a Altamiranda y tres hombres prófugos.

El violento hecho ocurrió en la madrugada del 28 de marzo en una vivienda ubicada en las calles 465 y 20, en el sur de la ciudad, cuando las víctimas dormían. Un mujer de 50 años y su amiga de 53 se encontraban con una nena de 10 cuando los asaltantes irrumpieron y comenzaron a exigir la entrega de dinero. En ese marco, a una de las víctimas le dieron un culatazo y le apuntaron con el arma a la cabeza de la menor.

Altamiranda fue detenido unos minutos después de que los delincuentes se escaparan de la casa, con televisores, dinero y otros objetos de valor. “Pirulo” se encontraba a unos 300 metros del lugar, en un  Volkswagen Suran, sin poder justificar qué hacía a la madrugada en esa zona. Para la policía y el fiscal, oficiaba de “campana” de los asaltantes.

El abogado Varela considera que no hay elementos suficientes para que su defendido esté detenido en la causa y pidió su excarcelación, la cual fue denegada por la Justicia de Garantías por asegurar que hay un riesgo procesal real y concreto, al estar tres personas prófugas.