La Fiscalía N°8 solicitó a la Justicia de Garantías la prisión preventiva para los dos imputados por el crimen de Catriel Sette (20), el joven que murió luego de haber sido apuñalado en el corazón el pasado 6 de septiembre en el barrio Cerrito Sur.

La fiscal María Isabel Sánchez solicitó la medida para que Ezequiel Galbán (18), acusado de ser quien apuñaló a Catriel, y Ezequiel Peralta (21) señalado como cómplice, sigan detenidos en la Unidad Penal 44 de Batán mientras avanza la investigación. La Justicia de Garantías tendrá cinco días para resolver la situación de los imputados.

Los sospechosos se mantuvieron prófugos cerca de una semana a pesar de los intentos de la policía por detenerlos. Acorralados por los investigadores, y con sus fotos difundidas por los medios, primero se entregó Galbán y luego Peralta. Ambos se encuentran alojados en la Unidad Penal 44 de Batán.

El hecho se registró el miércoles 6 de septiembre pasadas las 20 en el cruce de las calles Cerrito y García Lorca (59), cuando Catriel Sette se encontraba en la calle junto a un grupo de amigos en la vereda de la casa de uno de ellos y otros hombres llegaron en una moto al lugar.

Prácticamente no hubo intercambio de palabras y uno de los sujetos que vino en la moto se acercó y apuñaló a Sette justo en el corazón, hiriéndolo de gravedad. Acto seguido escaparon, mientras que los amigos de víctima la trasladaron a la sala de primeros auxilios del barrio Guanahani. Luego se dispuso que fuera internado en el Hospital Interzonal General de Agudos.

Sánchez parece no tener dudas al respecto de la participación de Galbán y Peralta en el asesinato: al primero lo imputó por “homicidio” y al segundo por “partícipe necesario”.  La principal hipótesis es que Galbán apuñaló a Sette por un problema vinculado a la hermana de Peralta.