LA CAPITAL pudo acceder a información más precisa del asalto a un mercado del barrio San José en el que su propietario abatió a los dos delincuentes.
Lo que comenzó como un intento de robo bajo la modalidad “motochorros” terminó en un escenario de sangre y muerte en la esquina de 20 de Septiembre y Quintana. El dueño del minimercado enfrentó a tiros a los dos delincuentes que habían ingresado a su local para asaltarlo y los mató. Antes había recibido culatazos en la cabeza y aún así logró tomar su arma.
Tal como lo informara LA CAPITAL en la noche del martes, el episodio ocurrió minutos antes de las 23 en el comercio de razón social “El Mercadito”. En ese momento dos hombres a bordo de una motocicleta Olmo 110cc de color rojo estacionaron a pocos metros de allí y mientras uno de ellos empuñaba una pistola Bersa TPR 9mm, entraron con obvios fines de robo.
La secuencia quedó registrada en las cámaras de seguridad del lugar y ya están en poder de la fiscal Romina Díaz. Todo lo que se precipitó fue de una violencia extrema. Uno de los asaltantes arremetió contra el comerciante, de 48 años, propinándole un fuerte golpe en la cabeza con la culata del arma, lo que le provocó un corte sangrante en el cuero cabelludo. Su cómplice, en tanto, intentaba recolectar objetos de valor y dinero de la caja, pero fue entonces cuando la situación tomó un giro irreversible: el almacenero, sangrante y confundido por los golpes, pudo extraer un arma de fuego de su propiedad —una Bersa calibre .380 Plus— y abrió fuego para repeler la agresión.
Dentro del local se vivieron momentos de pánico. El comerciante efectuó al menos cuatro disparos. Ambos delincuentes recibieron impactos en el pecho, a pesar de estar herido, consiguieron salir del local y pretender escapar a pie, pero se desplomaron a los pocos metros sobre la calle Quintana, entre 20 de Septiembre y España. Junto al cuerpo de uno de ellos, la policía halló la pistola 9mm con una vaina trabada en la recámara, lo que sugiere que el arma pudo haberse encasquillado durante el enfrentamiento. Este miércoles se confirmó que la pistola había sido robada tiempo atrás de una casa particular del Puerto.
Personal del Comando de Patrullas y de la Comisaría Segunda arribaron al lugar tras varios llamados al 911 de vecinos que escucharon las detonaciones. Médicos del SAME constataron el fallecimiento de ambos delincuentes, cuya identidad sigue sin conocerse a la espera del análisis del AFIS y del Renaper, bases de datos de comparación de datos biométricos y huellas dactiloscópicas.
Inseguridad y la reacción vecinal
Este hecho vuelve a poner sobre la mesa la crítica situación de inseguridad que atraviesan distintos barrios de Mar del Plata y en particular el barrio San José, una zona que en los últimos meses ha sido blanco constante de ataques bajo la modalidad de motochorros. Los residentes y comerciantes del sector manifiestan un agotamiento crónico ante la reiteración de delitos, señalando que la presencia policial no alcanza para disuadir a los delincuentes que operan con total impunidad.
En un fenómeno cada vez más frecuente, la postura de los vecinos pasó de la preocupación a una proactividad defensiva. En las cuadras linderas a “El Mercadito”, la instalación de cámaras de seguridad privadas, alarmas vecinales y grupos de alerta por mensajería se han vuelto la norma.
Por otra parte, la fiscal Romina Díaz, titular de la UFI Nº 6, caratuló la causa como Homicidio agravado por el uso de arma de fuego. Tras analizar las cámaras de seguridad del local, que registraron toda la secuencia del asalto, la magistrada dispuso que el comerciante fuera notificado de la formación de la causa, pero no adoptó medidas restrictivas de su libertad, al considerar de manera preliminar que actuó en legítima defensa.
Las armas secuestradas —la .380 del comerciante y la 9mm de los asaltantes— serán sometidas a peritajes balísticos el próximo 8 de enero. En tanto, las autopsias a los cuerpos de los delincuentes están programadas para la tarde de hoy en la morgue judicial. La motocicleta roja en la que llegaron los asaltantes quedó incautada en la seccional segunda para las pericias correspondientes.