Por Jorge Raventos
“¡Felicitaciones al cardenal Robert Francis Prevost, quien acaba de ser nombrado Papa! – escribió Donald Trump al conocer el nombre del nuevo Papa-. Es un gran honor darnos cuenta de que es el primer papa estadounidense. Qué emoción, y qué gran honor para nuestro país. Espero con ansias conocer al papa León XIV. ¡Será un momento muy significativo!”.
En sus cercanías no todas las reacciones fueron igual de entusiastas. Una extremista republicana norteamericana, Laura Loomer, que a principios de abril fue invitada por Trump al Despacho Oval, calificó de inmediato al flamante León XIV de ” marxista total, como el Papa Francisco”. Anticipándose, inclusive, a la elección del Cónclave, Steve Bannon, quien fuera guionista principal de Trump durante su anterior presidencia, alertó sobre lo que podía sobrevenir: informó que Prevost era el “tapado” en la carrera papal y que. por desgracia, era uno de los más progresistas. Con el resultado a la vista, Laura Loomer confirmó ácidamente el pronóstico: “Los católicos no tienen nada bueno que esperar. Sólo otra marioneta marxista en el Vaticano”.
Cuando los 133 cardenales en condiciones de elegir se enclaustraron en el cónclave los rumores diagnosticaban un cuerpo fuertemente tensionado por posturas encontradas, donde el sector más estructurado, pero no necesariamente el más numeroso, pretendía poner en marcha un repliegue de los principales procesos puestos en marcha o dinamizados durante el pontificado de Francisco.
Sin embargo, de la magna asamblea no emergió ni la franca revisión que añoraban Bannon o Loomis y que era sostenida en el cónclave por un pequeño pero influyente grupo de cardenales, ni tampoco la revisión en puntillas con que un sector de cardenales italianos procuraba articular voluntades en el mismo rumbo aunque con un tono más moderado.
El antifrancisquismo
Ya desde antes de la muerte de Francisco (en algunos casos, desde los primeros pasos de su papado) hubo sectores de la jerarquía dispuestos a la resistencia: el Papa del fin del mundo desarticuló focos poco santos de la curia romana y alteró los usos y las rutinas de la burocracia eclesial. La narrativa y el dinamismo que incorporó (“Hagan lío”) tanto como su deseo de abrir el diálogo sobre temas dejados de lado durante años (caso de la presencia de la mujer en las estructuras de la Iglesia, la situación de las personas divorciadas vueltas a casar, las personas homosexuales y los migrantes, los desposeídos y marginados) junto con su denuncia y combate al clericalismo, a la corrupción y al burocratismo, despertaron el entusiasmo de muchos pero también el ferviente rechazo de otros. Esa resistencia llegó a esgrimir la idea cismática, intentando utilizar como instrumento al renunciado Benedicto XVI (que por cierto tomó distancia de esa jugada) y procuró desarrollar un plan para la sucesión de Francisco, cuando llegara el cónclave que esperaban. El que acaba de concluir.
Pierden las “fake news”
En 2022, por ejemplo, se conoció un documento que llegó a un gran número de cardenales y finalmente trascendió a medios periodísticos especializados. Era un texto anónimo, mejor dicho, firmado con seudónimo –“Demos”-,cuyo autor se identificaría tiempo más tarde, en 2023, poco antes de morir: era el cardenal australiano George Pell. El texto empezaba así: “Los comentaristas de todas las escuelas, aunque por diferentes razones, con la posible excepción del padre Spadaro, SJ, coinciden en que este pontificado es un desastre en muchos aspectos, o más aún, una catástrofe”. Tras ese prólogo, venía un extenso catálogo de críticas al papado de Francisco: “El sínodo alemán habla de homosexualidad, de mujeres sacerdotes, de Comunión para los divorciados que se han vuelto a casar. Pero el papado calla…El cardenal Hollerich rechaza la enseñanza cristiana sobre la sexualidad. Y el papado calla. ….A veces Roma parece hasta confundida sobre la importancia de un monoteísmo riguroso, al aludir a un cierto concepto más amplio de divinidad; no precisamente panteísmo, sino como una variante del panteísmo hindú…La Pachamama es idolatría, aunque quizás no se la entendía inicialmente como tal… La Academia para la Vida está en grave desorden, por ejemplo, algunos de sus miembros han apoyado recientemente el suicidio asistido.
Las Academias pontificias tienen miembros y expositores invitados que apoyan el aborto…La falta de respeto a la ley en el Vaticano corre el riesgo de convertirse en un escándalo internacional. intenta establecer el perfil del futuro sucesor de Pedro: su tarea será – en palabras del autor – “restablecer las verdades de la fe y la doctrina que han sido oscurecidas” generando “confusión entre los fieles”. Y concluía con un diagnóstico que las circunstancias (sin ir más lejos, los funerales de Francisco) desmentirían: : “El prestigio político del Vaticano está ahora en un nivel bajo. La influencia política del Papa Francisco y del Vaticano es insignificante”; a lo que agregaban una convocatoria a la acción. “Estos temas deberían ser revisadas por el próximo Papa”.
Cuando la salud de Bergoglio se debilitó, a fines del año último, un documento casi idéntico, firmado esta vez por “Demos II”, reincidía en la programática restauradora. El autor se presentaba como un cardenal que ha recogido las sugerencias de otros cardenales y obispos que desean permanecer en el anonimato, y acusaba a Francisco de “ambigüedad en cuestiones de fe y moral” , cuestionaba su visión de la misericordia y el perdón (“Dios es misericordioso pero también justo”), y golpeaba a dos puntas, contra lo que describía como autoritarismo de Francisco y contra su apertura sinodal (“La Iglesia no es una autocracia, tampoco es una democracia”), impugnaba sus viajes (“”la Iglesia en Italia y en toda Europa -el hogar histórico de la fe- está en crisis. El propio Vaticano necesita urgentemente una renovación de su moral, una limpieza de sus instituciones, procedimientos y personal, y una profunda reforma de sus finanzas”, lo que exige “la presencia, la atención directa y el compromiso personal de cualquier nuevo Papa”).
Tras un pontificado que consideraba desastroso, Demos II tenía un objetivo: que la historia del cónclave de 2013 no se repitiera, que los “guardianes de la revolución” de Francisco no n impusieran a su sucesor en el Sacro Colegio. Y confesaba su deseo: “que esta contribución ayude a orientar las conversaciones, muy necesarias, sobre cómo debe ser el Vaticano en el próximo pontificado”,
En paralelo se difundía información falsa sobre los cardenales que, según sospecha de esos sectores, podían encarnar la continuidad de Bergoglio. Prevost se convirtió en un blanco predilecto. Estadounidense de nacimiento y nacionalizado peruano , sería el nuevo Papa. A principios de mayo se hizo circular una carpeta de 40 páginas en la que se recopilaba una vieja acusación que imputaba a Prevost haber encubierto casos de abusos tanto en Perú como en Estados Unidos”. Ese tema había sido oportunamente zanjado en tribunales eclesiásticos. En cualquier caso, no pudo evitar que los cardenales terminaran coincidiendo en su nombre en la cuarta votación del cónclave.
Un León panamericano
La proclamación del nuevo Papa parece representar una continuidad singular del derrotero marcado por Francisco. No una repetición, sino una continuidad.
Que el flamante pontífice sea estadounidense confundió en primera instancia a algunos observadores. Pero la partida de nacimiento es sólo uno de los elementos a tomar en cuenta.
La elección ratifica, en principio, un movimiento que, como se registró más de una vez en esta página, se inició con la entronización del polaco Karol Wojtyla: la conducción de la Iglesia ha emprendido un alejamiento de Europa Occidental; con Bergoglio incorporaría la mirada de las periferias en general y la latinoamericana y la rioplatense en particular. Con el papa León, estadounidense de Chicago que vivió y misionó 18 años en Perú y que está extensamente vinculado a la Iglesia latinoamericana, el papado queda en América, se panamericaniza, si se quiere.
El catolicismo se proyecta con fuerza hacia América del Norte. Donald Trump había distribuido por las redes una imagen suya disfrazado de Papa. La Iglesia ha puesto en escena un Papa americano de verdad. Un Papa que no comparte varias de las políticas más características del presidente de Estados Unidos.
En su primer mensaje urbi et orbi, desde el balcón de San Pedro donde fue proclamado, León XIV orientó con transparencia sobre el rumbo que piensa para su acción. La primera clave, se ha insistido, está en el nombre adoptado: Es referencia a León XIII, un pontífice modernizador y comprometido socialmente en tiempos de la revolución industrial, autor de la encíclica base de la doctrina social de la Iglesia (Rerum Novarum, “De las cosas nuevas”). desplegó un activismo ecuménico que se reflejó en relaciones muy estrechas con la ortodoxia turca y con el anglicanismo, impulsó el crecimiento del catolicismo en Estados Unidos.
Si el nombre elegido por Prevost es significativo, no le ha sido menos su mensaje: las dos menciones emocionadas a Francisco tributan al proceso de cambios impulsado por el Papa argentino. Empezó invocando la paz: una “paz desarmada y desarmante, humilde y perseverante”. Convocó a buscar una Iglesia abierta y misionera, “que construye puentes, el diálogo”, al servicio de “todos los que necesitan nuestra caridad, nuestra presencia, el diálogo y el amor”, una Iglesia “que camina”, una Iglesia sinodal que “busca siempre la paz, la caridad, que busca estar cerca especialmente de quienes sufren…”
Con León la Iglesia parece haber encontrado su camino para la continuidad y la unidad. Se afirma que en la cuarta ronda electoral, la que resultó decisiva, los votos que se inclinaron por él llegaron al centenar: 3 de cada 4. Los interesados en recalentar las hipótesis cismáticas están aislados. León se encargará de contener a los derrotados
Lo más visto hoy
- 1Detuvieron a una mujer por el ataque a tiros al policía de Drogas Ilícitas « Diario La Capital de Mar del Plata
- 2Se derrumbó el techo de un kiosco y aplastó a un hombre « Diario La Capital de Mar del Plata
- 3Cayó un helicóptero en una cancha de tenis: tres heridos « Diario La Capital de Mar del Plata
- 4Agobiante: la máxima pasó los 35° y se mantiene la alerta por tormentas « Diario La Capital de Mar del Plata
- 5Le pegaron un tiro en el pecho a un joven en el barrio Juramento « Diario La Capital de Mar del Plata
