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El apoyo de siempre, el anhelo de Garino y el magnetismo Campazzo

¡Qué gran localía tiene la Selección Argentina en Mar del Plata! El Polideportivo lució una vez más como en las tardes y noches del Preolímpico 2011. O como en el partido de agosto ante Bahamas. Pese al “saque” que los organizadores le dieron a las entradas, cuyos valores experimentaron un alza importante desde el día que comenzó la venta digital (martes 14 de febrero) hasta este jueves.

Por ejemplo, la localidad más económica, los codos, trepó de cuatro mil quinientos a seis mil pesos; las cabeceras bajas, de seis mil a siete mil quinientos; las plateas altas, de siete mil a ocho mil quinientos. Y así sucesivamente. A los hinchas no les importaron las “avivadas” y dijeron presente en gran forma. Desde la organización, se explicó que los precios orginales fueron una preventa con descuento, aunque no se había anunciado de esa manera.

Sólo no se cubrieron un puñado de ubicaciones en los sectores altos y en las rebatibles detrás de los aros. Unas ocho mil personas, en consecuencia, alentaron con fervor al equipo desde el momento de cantar el Himno Nacional.

El marplatense Patricio Garino, por fin, pudo jugar un partido oficial ante los suyos para la Selección en el máximo escenario de su ciudad. Lo había hecho por algunos minutos el 5 de julio de 2015, en aquel amistoso ante Uruguay que representó la despedida de Leo Gutiérrez como jugador internacional, y salió en el segundo cuarto por una distensión muscular. Ante Bahamas no pudo estar en estas mismas eliminatorias. Y este jueves por fin se dio el gran gusto.

Garino fue uno de los más aplaudidos. El magnetismo, sin embargo, que genera la figura de Facundo Campazzo -afectivamente, otro marplatense por su prolongado y exitoso paso por Peñarol- no tiene igual. Para colmo, el base, con algunas penetraciones fantásticas, anotó los primeros nueve puntos del equipo. A muchos les quedaron las palmas rojas de tanto aplaudir. Otra de las grandes ovaciones se la llevó Carlos Delfino, uno de los preferidos de la gente.

Buena iniciativa de la organización de apelar a los animadores locales. Federico Ingrassia, un cheque al portador, animó la fiesta de manera admirable. La presentación olímpica de los equipos estuvo a cargo de Carlos Más, quien siempre lo hace en los partidos de Peñarol. Y el domingo tomará la posta Máximo Falaschini, el habitual “maestro de ceremonias” quilmeño.

Al igual que ocurrió en la ventana de agosto, cuando Argentina enfrentó y venció a Bahamas en este mismo estadio, se montó en el sector de estacionamiento del Polideportivo un fan-fest con juegos promocionales de los sponsors (obvio, no faltó el aro para efectuar lanzamientos), una pantalla gigante en donde se transmitió el partido ante Canadá, food trucks y música para entretener a la gente.

En tren de comparaciones, vale reconocerlo, esta vez el procedimiento de ingreso y de movimiento dentro del estadio resultó mucho más ordenado que en la ventana FIBA de agosto. El público estuvo más cómodo y aquellos que concurrieron para cumplir diferentes funciones periodísticas, también tuvieron más facilidades.

Dado el escaso tiempo disponible para entrenar y evaluar a sus jugadores, el entrenador Pablo Prigioni recién definió la lista de doce jugadores para firmar la planilla en la mañana de este jueves. Quedaron afuera de la nómina Leandro Lema, Juan Ignacio Marcos, Lucio Redivo, Roberto Acuña y Franco Baralle.

Cada presentación del seleccionado argentino de básquetbol genera una especie de revolución. En la gente y también en el periodismo especializado, que suele movilizarse para seguir al equipo “albiceleste” en las diferentes competencias.

Lógicamente, Mar del Plata, en pleno febrero y en un juego decisivo de cara a obtener el pasaje al Mundial, constituía un atractivo difícil de resistir. En consecuencia, colegas de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y otros puntos del país se juntaron en Mar del Plata.

Y el encuentro fue propicio para una reunión informal entre varios integrantes de Apreba (Asociación Prensa Básquetbol de Argentina), para tratar diferentes temas inherentes a la problemática y el desenvolvimiento de la tarea específica. La entidad fundada precisamente en Mar del Plata, en septiembre de 2018, es ahora presidida por el santafesino Diego “Turco” Vergara. El primer mandato le correspondió al marplatense Rubén Muñoz.

Marcelo Jiménez, presidente de Quilmes, siguió el partido desde el sector VIP. El directivo “tricolor” confirmó que su equipo jugará los dos primeros partidos que le corresponden en condición de local del mes de marzo en el Polideportivo “Islas Malvinas”.

La intención original era ejercer la localía una vez más en Santa Clara del Mar. Sin embargo, hubo que encargar nuevos tablero general y los dos que marcan los 24 segundos de posesión para el Polideportivo de la vecina localidad. Y no llegarán a tiempo para esos compromisos. En consecuencia, Quilmes recibirá el viernes 3 y el domingo 5 a Zárate Básquet y Atlético Pilar, respectivamente, en Mar del Plata.

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