El gobierno de Guillermo Montenegro descartó cobrar una tasa municipal a los turistas que ingresen a la ciudad durante la temporada.

Luego de que Pinamar confirmara que evalúa el cobro de $ 100 para financiar el operativo sanitario para hacer frente al coronavirus y de que autoridades de otros municipios de la Costa Atlántica admitieran que también lo tienen en estudio, altas fuentes locales aseguraron que no está en carpeta una medida similar en Mar del Plata.

“En las reuniones de los intendentes con funcionarios provinciales nunca se mencionó la posibilidad de cobrar una tasa. Sí se habló de un seguro, pero no se avanzó en un acuerdo”, dijeron a LA CAPITAL cerca del jefe comunal.

El intendente de Pinamar, Martín Yeza, reveló que evalúa una “tasa turística transitoria” con una suma mínima, pero que podría ser significativa en volumen si se toma en cuenta la dinámica de visitas que tiene su municipio.

“Sería algo parecido a lo que ya existe en muchas ciudades argentinas destinado a equipar nuestro sistema de salud con personal”, señaló sobre un proyecto que aparece firme en sus lineamientos y que da casi por hecho en su futura aplicación, publicó el diario La Nación.

Por su parte, Infobae mencionó que otros jefes comunales de la Costa Atlántica analizan cobrar la tasa de ingreso a sus municipios, como el de Necochea, Arturo Rojas, y el de Villa Gesell, Gustavo Barrera.

Más allá de estas diferencias de criterio, en los últimos días quedó claro que los distritos bonaerenses no exigirán un hisopado negativo de Covid-19 para permitir la entrada de los veraneantes.

Según anunció el gobierno de Axel Kicillof, deberán bajarse la aplicación Cuidar Verano y detallar allí los datos de destino, hospedaje y el grupo de pasajeros que viajen juntos. El ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, aclaró luego que su utilización no será obligatoria.  

El lunes, en un acto en el Museo Mar, el gobernador y el ministro de Producción, Augusto Costa, anunciaron que el 1 de noviembre podrán comenzar a ingresar a los distintos distritos los propietarios no residentes, y que desde el 1 de diciembre comenzará oficialmente la temporada, que se extenderá hasta el 4 de abril.

La gastronomía y la hotelería establecerán aforos máximos para cada actividad en función de las dimensiones edilicias. Solo se permitirán espacios con ventilación natural o ventilador (estarán prohibidos los aires acondicionados). Y no se permitirán los espacios comunes, salvo las piletas, que deberán funcionar con turnos y aforos.

Además, el ministro de Producción anunció que no estarán permitidos los campings y que estaría prohibido el entretenimiento en lugares cerrados, en una medida que incluía a teatros, casinos, bingos y boliches. Sin embargo, después de una reunión que mantuvieron este jueves, la Provincia y los productores teatrales llegaron a un consenso sobre la apertura de la actividad con protocolos. Por su parte, los gremios de casinos se mantienen expectantes ante la posibilidad de que se produzca alguna variante y los propietarios de boliches anticiparon que buscarán al aire libre.