Luego de la vandalización de uno de los lobos marinos realizada por un simpatizante del Club Gimnasia y Esgrima La Plata, el municipio comenzó la restauración del monumento histórico declarado Patrimonio Histórico Nacional. Asimismo, desde la comuna se solicitará el resarcimiento económico por los gastos erogados al hincha del club platense responsable del hecho.

Alejandro Vicente, secretario de Gobierno de la comuna, señaló que “el municipio está trabajando a través de la Dirección de Restauración de Monumentos Escultóricos preparando lo que va a significar dejar ese monumento histórico en perfectas condiciones. Ese costo será trasladado a la persona que confesó haber sido el autor del hecho vandálico para resarcir a la comuna y recuperar el dinero erogado por los trabajos”.

“Ayer (por el lunes) recibimos una carta del Club Gimnasia y Esgrima La Plata firmada por sus autoridades quienes, si bien se pusieron a disposición y repudiaron el hecho, manifestaron que no tienen ninguna responsabilidad en el hecho porque la persona que ha intervenido no pertenece a la comisión directiva”, agregó el secretario de Gobierno.

Por su parte, Constanza Addiechi precisó que “cuando encontramos estos grafitis sobre estas esculturas tan emblemáticas de la ciudad inmediatamente dimos parte a la policía, a la comisión nacional de Monumentos y responsables de Provincia”.

Seguidamente, Addiechi añadió: “Vamos a trabajar para solucionar el tema, primero se redactó el esquema que se llevará adelante para la remoción de estos grafitis que fue enviado a la comisión nacional de Monumentos, entidad que tiene que autorizarlo. Es importante recordar que las esculturas de Fioravanti fueron declaradas Patrimonio Histórico Nacional”.

Con respecto al procedimiento para la restauración, Addiechi informó que “inicialmente se retira a hisopo las capas vidrias que han dejado los esmaltes sintéticos de los aerosoles. Luego, se empieza a trabajar con compresas de diferentes productos en distintos tiempos de exposición y dilución para poder retirar estos fantasmas que dejan los pigmentos en la piedra”.