Con un esfuerzo extremo, Boca Juniors venció a Claypole, recién ascendido a la Primera C, por 2 a 1, y avanzó a los 16avos de final de la Copa Argentina de fútbol, donde se enfrentará a Defensores de Belgrano.

Boca quedó en deuda en la primera mitad. Hasta los 30 minutos, Claypole había sido el mejor de los dos, y el arquero Javier García había tenido que intervenir un par de veces y hasta Emmanuel Mas había salvado de cabeza una gran jugada preparada. El “xeneize” había mostrado poco y nada en ataque y además defendía mal.

Tanto que a los 29′, tras un corner desde la derecha, ganó en lo alto Emanuel Díaz, su cabezazo se estrelló en el travesaño, en el rebote ganó otra vez de cabeza Fernando Pasquale, García atajó en gran forma pero la nueva chance no la desperdició Leonel Landaburu quien tocó al gol ante la insólita pasividad defensiva de Boca.

El equipo de Miguel Angel Russo despertó después del gol. En la primera aproximación, Exequiel Zeballos le dio al travesaño tras una cesión de Nicolás Capaldo, a los 33′, y dos minutos después, Edwin Cardona puso uno de sus pases distintos para habilitar a Sebastián Villa, quien eludió a Cristian Ordoñez dentro del área y sometió al arquero Tiago Libares con un potente derechazo para empatar el partido.

El panorama cambió en el complemento. Por más peso específico y mayor respuesta física, Boca inclinó la cancha. Sin lucir, acorraló a Claypole contra su propia área aunque casi no generó situaciones de riesgo. Y la más clara fue para Juan Cruz Iglesias, a los 28′, que obligó a otra salvada de García.

Hasta que a los 31′ se juntaron Cardona y Gonzalo Maroni, éste frenó en el área, giró y su derechazo no pudo ser contenido por Libares. Fue el 2 a 1 que significó la clasificación pero dejó muchas más dudas que certezas. Sobre todo porque en la última de la noche, Pedro Muné no llegó a conectar el empate por milímetros.