La Bombonera es un estadio mítico, con mucha historia, un símbolo para los hinchas de Boca. Por eso, cuando Daniel Angelici amagó con construir una nueva cancha, debió volver sobre sus pasos por las críticas recibidas.

Claro que la idea de ampliar el escenario permanece en la cabeza de los directivos “xeneizes”. Y ahora, el arquitecto esloveno Tomaz Camernik acercó un nuevo proyecto que implicaría una solución a problemas como el de la capacidad y la visibilidad.

Hoy el club tiene más socios que espacio disponible, por lo que este diseño se presenta como una alternativa viable para sumar más espectadores en los partidos en condición de local.

El proyecto implica continuar las tres bandejas en el sector donde se encuentran los palcos. Estas tribunas se situarán por sobre la vereda, que se convertirá en un paseo peatonal con negocios, bares y restaurantes. Así, no se tendrían que demoler las casas de las manzanas linderas a La Bombonera.

Desde las nuevas bandejas los simpatizantes podrían ver desde una ubicación más cercana a los jugadores, sin modificar demasiado las medidas del campo de juego, que se achicará dos metros. En definitiva, el estadio pasaría de tener 50 mil a 70 mil localidades para espectadores sentados.

El costo de este proyecto es de 50 millones de dólares y la construcción demandaría aproximadamente un año, sin cambiar la localía mientras se realizan las obras.